Las esquirlas del cimbronazo que significó la eliminación de la Selección argentina de Rusia 2018 aún siguen lacerando las heridas de los hinchas, pero el equipo tendrá en un futuro cercano la posibilidad de rearmar su estructura pensando en cómo continuar tras el cierre de ciclo de varios jugadores.
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Las esquirlas del cimbronazo que significó la eliminación de la Selección argentina de Rusia 2018 aún siguen lacerando las heridas de los hinchas, pero el equipo tendrá en un futuro cercano la posibilidad de rearmar su estructura pensando en cómo continuar tras el cierre de ciclo de varios jugadores.
Es que para el 2019 está prevista la Copa América en Brasil, y si bien aún resta resolverse si Sampaoli continuará o no en su cargo, la llamada “renovación” ya está en marcha.
Sin Javier Mascherano ni Lucas Biglia, y probablemente Ángel Di María, otro que puede integrar esa lista es Gonzalo Higuaín, pero nada comunicó al respecto. Lionel Messi no se pronunció aún si continuará vistiendo la camiseta argentina, más allá de que el hincha desea que siga, y Sergio Agüero aclaró que si lo siguen citando, estará a las órdenes.
Pensando en una alternativa para la Copa América, el panorama es el siguiente: en el arco el puesto está disputado, porque la edad no suele ser un impedimento, y si bien Sergio Romero no estuvo en Rusia porque lo desafectaron a último momento por lesión, es un jugador que sigue siendo convocable. Entre las variables podría sumarse Gerónimo Rulli, quien juega en la Real Sociedad.
Entre los defensores hay nombres que seguirán porque se ganaron su lugar dentro de este período, como Nicolás Otamendi, Nicolás Tagliafico, Gabriel Mercado y Marcos Rojo, pero se podrán sumar aquellos que no estuvieron porque no se recuperaron de lesiones, como Ramiro Funes Mori, Germán Pezzella y Ezequiel Mammana. En la consideración del técnico, previo al Mundial, estuvieron dos hombres de Independiente, Fabricio Bustos y Alan Franco, y un nombre que aparece como nuevo podría ser el de Juan Foyth, el exzaguero de Estudiantes, actualmente en el fútbol francés.
En la zona de mediocampistas hay un poco más de variantes, con Giovani Lo Celso -que de ser titular en la previa pasó a no jugar un minuto en Rusia 2018-, Maxi Meza y Marcos Acuña, de los que tomaron parte del Mundial. Pero hay quienes piensan también en Fernando Gago, Franco Cervi, Santiago Ascacibar, Leandro Paredes, Emiliano Rigoni, Ricardo Centurión y Matías Kranevitter.
En el rubro delanteros se destaca sin dudas el nombre de Mauro Icardi, quien con tiempo de preparación podrá ser el mismo goleador de la Liga italiana tal vez, pero también hay que nombrar a Paulo Dybala, que apenas sumó un puñado de minutos ante Croacia en este Mundial; Lautaro Martínez y Cristian Pavón.
A estos nombres bien podría sumársele algún que otro jugador que surja en el “semillero” del fútbol argentino, bastardeado en la última década y que, salvo algunas apariciones repentinas, deberá esperar al menos seis años para recuperar una camada formada por un proyecto serio.
Siempre teniendo como objetivo final el Mundial de Qatar 2022, que aparece lejano en el tiempo, pero para el que habrá que empezar a trabajar desde este momento y con un proceso sólido y con coherencia.