Otra triste y lamentable jornada vial se vivió ayer en Salta capital y el interior. Al cierre de esta edición la urgencia por la información requería una de las últimas coberturas del día. Los lectores del diario en papel y de la Web daban cuenta del accidente ocurrido en la ruta nacional 51, avenida John F. Kennedy, donde dos autos colisionaron y uno de ellos pegó contra uno de los enormes postes delineadores, situación que hizo que el auto volcara para quedar con las cuatro gomas hacia arriba. Entre los trágicos hechos se lamentaron dos pérdidas, la de un bebé de un año y cuatro meses, en Orán, y la de un joven de 31 años en Villa San Antonio de esta ciudad.
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Otra triste y lamentable jornada vial se vivió ayer en Salta capital y el interior. Al cierre de esta edición la urgencia por la información requería una de las últimas coberturas del día. Los lectores del diario en papel y de la Web daban cuenta del accidente ocurrido en la ruta nacional 51, avenida John F. Kennedy, donde dos autos colisionaron y uno de ellos pegó contra uno de los enormes postes delineadores, situación que hizo que el auto volcara para quedar con las cuatro gomas hacia arriba. Entre los trágicos hechos se lamentaron dos pérdidas, la de un bebé de un año y cuatro meses, en Orán, y la de un joven de 31 años en Villa San Antonio de esta ciudad.
Poco más de una semana de aquel "viernes negro" en la provincia, donde dos personas perdieron la vida en El Quebrachal y otra en Nazareno, producto de sendos accidentes de tránsito, la tragedia volvió a enlutar la intimidad de distintas familias salteñas e innumerables personas vinculadas a las mismas. Muertes en rutas, avenidas y calles de la ciudad y el interior que siguen ensanchando las grises cifras viales, números que se suman a una pandemia vial a nivel nacional y también mundial.
Sin dudas el hecho que sacudió el ambiente vial y estremeció los corazones de propios y extraños fue la pérdida de un bebé de un año y cuatro meses en la ciudad de Orán. Cerca de las 18 de ayer en la calle Pedro Ortiz de Zárate y pasaje Lucardi, un auto marca Citroen C4 conducido por un joven de 28 años arrolló al bebé. Fue trasladado de urgencia en un vehículo particular al hospital San Vicente de Paúl donde ingresó sin signos vitales, según fuentes policiales.
Según pudo averiguar El Tribuno, el conductor sería familiar de la pequeña víctima, salió de la casa ubicada en la mencionada dirección donde al parecer compartían una fiesta. Al subirse al rodado el joven no se percató de que el bebé increíblemente jugaba atrás del auto, encendió el motor y sin saber lo atropelló. En el caso intervino la Fiscalía de Graves Atentados de Orán, desde donde dispusieron que se haga presente personal de Criminalística a los fines de establecer la mecánica del trágico siniestro.
En la zona sur
Pasadas las 21 de anoche un Fiat Palio color celeste y un Ford Falcon azul colisionaron sobre la ruta 51 a la altura del acceso del barrio 14 de Mayo. La incertidumbre del siniestro y el temor a la tragedia surgió dado que ambos vehículos transportaban menores de edad, sin embargo la Policía informó que no se lamentaron heridos de gravedad.
Según las primeras hipótesis que manejaban anoche peritos de Criminalística que trabajaron en la escena, ambos vehículos circulaban en la misma dirección de norte a sur, el Ford lo hacía por su mano derecha cuando el Fiat Palio habría acelerado con la intención de pasar -por el carril izquierdo- y habría impactado con el Falcon. Producto del choque perdieron el control de los rodados que se desviaron a la banquina.
En medio del despiste el Palio impactó con el poste de señalización y terminó volcando, el auto era conducido por una joven de 30 años que iba acompañada por su hija de dos. Mientras que el Falcon era manejado por un hombre, quien iba acompañado de su pareja también mayor de edad y sus hijos, todos menores de 16, 15, 4 y 2 años. Los menores fueron trasladados al Materno Infantil con golpes y las mujeres mayores con politraumatismo y traumatismo encefalocraneano, una de ellas con un corte en su cabeza.
Joven murió tras incrustarse en la pared de una casa
La camioneta que conducía el joven de 31 años. Policía de Salta
Tras la fatalidad de perder el control de la camioneta, por motivos que hasta el momento no se dieron a conocer, un joven de 31 años no pudo evitar incrustarse en la pared de una casa en Villa San Antonio.
En el hecho que ocurrió en la madrugada de ayer en el mencionado barrio de esta ciudad, la víctima fue identificada por la Policía como Cristian Exequiel Orellana. Con las muertes del joven y la del bebé ascienden a 111 los fallecidos en siniestros viales en toda la provincia en lo que va del año.
Pasadas las cuatro de la mañana de ayer, en la intersección de calles Ituzaingó y Costanera, una camioneta Ford Ranger perdió el control y siguió directamente contra la pared de una vivienda. Luego del fuerte impacto efectivos policiales fueron alertados y se trasladaron al lugar donde asistieron al conductor de 31 años, quien fue llevado de urgencia al hospital San Bernardo.
Minutos más tarde de haber llegado al instituto médico de Salta capital, los médicos que asistieron al joven víctima de un atroz siniestro vial señalaron que su muerte se produjo a raíz de un paro cardiorrespiratorio. Peritos trabajaron en el lugar tratando de verificar las mecánicas del siniestro, mientras que en la casa donde se incrustó el rodado se registraron solo daños materiales.