Psicopedagogos, kinesiólogos y fisioterapeutas, fonoaudiológos, acompañantes terapéuticos y otros profesionales de la salud que realizan tratamientos a personas con discapacidad hicieron un paro y movilización ayer temprano frente a la Superintendencia de Servicios de Salud de la Nación, sobre la avenida Belgrano 570.
inicia sesión o regístrate.
Psicopedagogos, kinesiólogos y fisioterapeutas, fonoaudiológos, acompañantes terapéuticos y otros profesionales de la salud que realizan tratamientos a personas con discapacidad hicieron un paro y movilización ayer temprano frente a la Superintendencia de Servicios de Salud de la Nación, sobre la avenida Belgrano 570.
Cerca de las 9, con carteles que rezaban: "Respeten los derechos de niños con discapacidad, familias y profesionales prestadores de servicios", o "paguen lo adeudado y actualicen el valor de honorarios del nomenclador", los profesionales se expresaron en la puerta del organismo.
En el lugar se escucharon silbidos, aplausos y cánticos con la consigna: "¿Qué queremos? Cobrar! Basta de precarización laboral".
Viviana Vacherand, psicopedagoga y referente de Psicopedagogos Autoconvocados, explicó a El Tribuno: "En primer lugar pedimos que nos inscriban en la Superintendencia de Salud como prestadores, porque tenemos cortados todos los tratamientos. Hay una resolución, la 276, que establece que hasta fin de año por lo menos podemos continuar con los tratamientos, pero esto no se está cumpliendo. Sucede que nos exigen la licenciatura para poder seguir cumpliendo nuestra función".
Según Vacherand, los licenciados en psicopedagogía y psicopedagogos egresados de terciarios "poseen las mismas incumbencias en cuanto a la atención del paciente". "La única diferencia sería el trabajo de investigación. Por eso nos están dejando sin trabajo. Esta decisión que tomaron tiene que ver con una política de ajuste, con la eliminación de subsidios de Nación a obras sociales que eran destinados a tratamientos de chicos con discapacidad. Las obras sociales no quieren hacerse cargo de esos pagos y no reconocen a los psicopedagogos porque la Superintendencia no nos acepta como prestadores de salud. En la provincia de Salta hay alrededor de 350.000 personas con discapacidad y 1.500 psicopedagogos matriculados, aproximadamente, de los cuales solo 70 son licenciados pero 15 de estos trabajan con obras sociales, haciendo clínica", informó.
Vacherand aseguró que en muchos casos, los psicopedagogos "estamos trabajando gratis, porque a nuestros pacientes no los dejamos desamparados. Sin embargo, las obras sociales no nos autorizan las prestaciones y nos exigen la licenciatura. En mi caso particular estoy estudiando, como muchos colegas, pero si no nos pagan por nuestro trabajo no podremos pagar la universidad".
La referente anticipó que Psicopedagogos Autoconvocados están a punto de presentar un recurso de amparo y que continuarán con manifestaciones frente a las obras sociales.
Retraso de pagos
Diego Quipildor, fisioterapeuta, expresó que la protesta también obedece al retraso de pagos. "Pedimos que las obras sociales nos paguen en tiempo y forma nuestros honorarios. Hay una ley, la 24.901 que los establece, pero lo que no está reglamentado es el modo y el momento en que nos deben pagar, ese es nuestro mayor problema", detalló.
Actualmente, en el colegio de kinesiólogos y fisioterapeutas hay unos 1.000 matriculados. 50 están autoconvocados.
Quipildor manifestó que existe una gran demora desde que los profesionales presentan sus plantes de tratamiento y presupuesto, pidiendo la autorización de las prácticas a las obras sociales hasta que salen las autorizaciones. "Esperamos de 2 a 4 meses para poder empezar una práctica. Por ende, el tiempo, la demora en cobrar no baja de 6 meses", dijo.
La actualización de valores es otro de los reclamos. "Pedimos que se actualicen, ya que desde al año pasado no se actualizaron", finalizó.
Desde el año pasado
Los psicopedagogos que realizaron la marcha expresaron que “hay colegas que no están cobrando desde enero del año pasado y lo que se cobra es a valores de 2017. La situación es crítica”.
Además recalcaron la necesidad de un aumento.
“Todos los profesionales de la salud que marchamos pedimos que nos actualicen el nomenclador para que cobremos más porque estamos percibiendo valores totalmente desactualizados. Encima que nos pagan fuera de término, es poco. Por esta razón pedimos un aumento y no exigimos un monto fijo sino que este se adapte a la situación económica, que está muy complicada por la inflación”, sostuvieron.