Trece personas quedaron detenidas en Santa Fe sospechadas de integrar una poderosa banda dedicada a la venta de autopartes ilegales. En el marco de los allanamientos realizados por la Policía se secuestró un millón de repuestos.
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Trece personas quedaron detenidas en Santa Fe sospechadas de integrar una poderosa banda dedicada a la venta de autopartes ilegales. En el marco de los allanamientos realizados por la Policía se secuestró un millón de repuestos.
Según confirmaron fuentes oficiales, los operativos se llevaron a cabo luego que un agente encubierto se hiciera pasar por cliente y lograra revelar el accionar delictual de la organización.
Además de las detenciones y del secuestro de las autopartes, los efectivos incautaron 950 rodados en proceso de desguace, un revólver calibre 32 largo, y una escopeta 1270 semiautomática (todos las armas con municiones).
"Detrás de los desarmaderos, muchas veces se esconden hechos de sangre que alarman a los ciudadanos", aseguró la ministra de Seguridad de la Nación Patricia Bullrich.
Según los investigadores, el "modus operandi" de la banda era el siguiente: cobraban los repuestos en el local y derivaban a los clientes con un papel informal de pago, para el retiro del material a un depósito desarmadero- ubicado a pocas cuadras del lugar.
Para evidenciar la operación de la banda, con conocimiento de la fiscalía actuante, un detective encubierto realizó una compra controlada con dinero "marcado", simulando ser cliente y retirando el material ilegal en el desarmadero de entrega.
Los allanamientos se realizaron en el marco de una investigación llevada a cabo por la Dirección Nacional de Investigaciones y por la Delegación Rosario de la Policía Federal.
En el caso tomó ntervención la Fiscalía a cargo de Ezequiel Hernández, responsable de la UFE Delitos Complejos de la provincia de Santa Fe.