Utilizan maderas y otros materiales nobles pero, sobre todo, ponen todo su empeño y su creatividad para que los chicos que los reciban puedan disfrutarlos y usarlos mucho más que un juguete plástico porque son "a prueba de niños".
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Utilizan maderas y otros materiales nobles pero, sobre todo, ponen todo su empeño y su creatividad para que los chicos que los reciban puedan disfrutarlos y usarlos mucho más que un juguete plástico porque son "a prueba de niños".
La idea surgió de un grupo de mujeres desocupadas de Aguaray a las que se sumaron tres varones que pusieron manos a la obra, primero para armar el proyecto y una vez que contaron con todo lo necesario -herramientas, materiales y sobre todo capacitación- para fabricar juguetes y didácticos que pueden perfectamente competir con las grandes marcas, con la diferencia que los venden a mucho menor precio.
El debut fue el lunes anterior cuando se instalaron en la plaza central de Aguaray y prácticamente vendieron todo lo que tenían en exhibición. "Estamos felices porque nuestro trabajo gustó, vendimos muy bien y ahora con lo recaudado comenzamos a comprar todos los materiales e insumos para seguir fabricando. Hemos puesto mucho empeño y toda nuestra confianza en este proyecto", expresó con pleno entusiasmo Claudia Aguilar, una de las mujeres del grupo de emprendedoras locales.
Cuando idearon el proyecto, según lo relató Claudia Aguilar, "le pedimos apoyo a la empresa Tecpetrol para que nos acompañe en la iniciativa. Para nosotros era imposible costear la adquisición de herramientas, pequeñas maquinarias, materiales e insumos. Cuando tuvimos todo nos instalamos en una casa de familia con nuestro taller; la empresa Tecpetrol también nos contrató una capacitadora y así comenzamos a trabajar en este proyecto en el que confiamos porque creemos que tenemos todo para crecer", agregó.
El lunes a la noche, cuando exhibieron sus productos ya elaborados, sorprendieron a todos por la calidad, la creatividad y hasta la presentación de cada juguete o didáctico. "Con lo recaudado vamos a comprar más materiales para seguir produciendo y ahora apenas tendremos tiempo porque con el Día del Niño creo que nos vamos a quedar sin nada de stock", se entusiasmó Claudia.
La emprendedora explicó que "la idea no solo es vender en Aguaray sino llegar a todos los que quieran adquirir nuestros productos. Los interesados pueden comunicarse conmigo", precisó Claudia, quien tiene la certeza de que podrán colocar sus productos en salas maternales, jardines de infantes y venderlos a todo el que quiera obsequiar a sus niños juguetes fabricados aquí.