Mientras sigue la incertidumbre sobre el inicio de la construcción de una nueva autopista, se están realizando precarias obras de mantenimiento en la ruta nacional 9/34, que consisten en un raspaje de la cinta asfáltica, lo que representa un peligro por el desgaste que presenta en el sur.
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Mientras sigue la incertidumbre sobre el inicio de la construcción de una nueva autopista, se están realizando precarias obras de mantenimiento en la ruta nacional 9/34, que consisten en un raspaje de la cinta asfáltica, lo que representa un peligro por el desgaste que presenta en el sur.
Los trabajos están a cargo de la concesionaria del peaje, Autovía Buenos Aires a Los Andes, y viene avanzando desde Metán a Rosario de la Frontera.
En esa zona, la denominada "ruta de la muerte" es solamente de dos carriles y debido a los baches y deformaciones, la firma decidió pasar una máquina que realiza un raspaje del concreto, lo que está siendo duramente cuestionado por los que la transitan a diario y por transportistas y camioneros.
El Tribuno recorrió nuevamente la ruta nacional 9/34, desde General Gemes hasta Rosario de la Frontera, donde actualmente Autovía avanza con esas tareas.
Hay deformaciones y cortes en el pavimento con peligrosos desniveles de un carril a otro. Luego del texturado o fresado quedan unas especies de líneas sobre la cinta asfáltica, lo que seguramente acrecentará los riesgos en épocas de lluvia.
Lo que sacan de la ruta con esas tareas es arrojado en las banquinas. Son tan malos los trabajos que quedan piedras y restos del concreto sobre la ruta que vuelan peligrosamente ante el paso de los vehículos.
Mientras el personal trabaja se desarrollan tareas preventivas de señalización y la circulación de rodados se hace por un solo carril, de un sentido a la vez. Pero lo que es más increíble es que se están pintando las líneas divisorias de carriles, a mano, y utilizando brochas.
Ese trabajo de pintura es totalmente imperfecto ya que se hace a cálculo y en muchos sectores están cruzadas.
En el Congreso
Los legisladores nacionales salteños vienen manifestando se preocupación por el deterioro de la ruta nacional 9/34 y reclamando la construcción de una nueva autopista. "Tanto en el tramo Rosario de la Frontera-Metán, como en la zona de General Gemes y la unión con Jujuy, es una ruta totalmente postergada. Hemos tenido muchas veces planteos sobre la necesidad de hacer la obra a nivel de autovía o autopista. En Vialidad tiene un montón de proyectos, pero la realidad que esta es una de las primeras rutas que se anunció a penas se inició el mandato del presidente Macri. Dijeron que iba a comenzar en agosto de 2016 y todavía ni siquiera se inició el proceso de licitación", dijo el diputado nacional Javier David, cuando recibieron en el Congreso al jefe de Gabinete de Nación, Marcos peña.
Con respecto a la ruta nacional 9/34, Peña informó en Diputados: "Estamos resolviendo en materia de infraestructura, los primeros trabajos avanzan en el límite con Salta, hasta el empalme con la ruta 66. La etapa segunda que tiene que ver con el PPP, de agosto de 2018, que es el segundo tramo vial, saldrá la licitación de lo que comprende Salta, Rosario de la Frontera, con lo cual seguimos avanzando".
Obras de desagües
Mientras tanto, para evitar que cuando llueva con intensidad el agua cruce de un lado al otro y provoque cortes en la ruta nacional 9/34, la concesionaria del peaje, la empresa Autovía Buenos Aires a Los Andes, viene desarrollando obras en el sur provincial.
Uno de los trabajos más importantes se desarrolló en el kilómetro 1441, cerca del puesto de control de Gendarmería Nacional, en El Naranjo, donde existía una alcantarilla en desuso que fue acondicionada por completo y además se hicieron obras complementarias. Allí el verano pasado hubo numerosos inconvenientes debido a que cuando se producían tormentas se inundaba. Incluso el agua la cruzaba de un lado al otro, por lo que hubo cortes en el tránsito. La alcantarilla estaba prácticamente abandonada y tapada por lodo y malezas. Luego se trabajó para despejar todo el sector.
Pero además hacia el este de la cinta asfáltica se ejecutaron obras de defensa y encauzamiento. El objetivo es que las aguas que provienen de los campos de la zona y bajan de oeste a este, por la pendiente que hay en el lugar, circulen sin problemas cuando se produzcan lluvias intensas.
Por otra parte, en el kilómetro 1.446, cerca de Yatasto, hubo que hacer tareas similares, pero debido a la erosión de los campos. En ese sector, hacia el este de la banquina de la transitada ruta nacional 9/34, Autovía tuvo que construir un muro para evitar las consecuencias que provoca el avance de las aguas. Actualmente trabajan en la construcción de defensas cerca de El Naranjo.