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Recta final en el juicio por el crimen del cambista Felipe Torres

Entre hoy y mañana se definirá el juicio. Hoy declararía Lombardero Salas, principal imputado.Según la Fiscalía, el móvil del crimen fue el robo, donde hubo “alevosía y ensañamiento”.
Lunes, 06 de agosto de 2018 00:00

Miradas, dudas y un profundo llanto fue una de las últimas imágenes que dejó la audiencia del viernes en la Sala III del Tribunal de Juicio del Poder Judicial en esta ciudad. Desde el miércoles pasado se desarrolla el debate oral y público por la muerte de Felipe Torres, el cambista de 57 años brutalmente asesinado el 5 de enero de 2017 en su oficina de calle España 618, la city salteña en pleno microcentro. Para hoy se espera que declare por primera vez Sebastián Lombardero Salas, imputado por el delito de "homicidio doblemente calificado criminis causa, alevosía y ensañamiento", y también Micaela Tobío, acusada de "encubrimiento agravado". Mientras que para mañana están previstos los alegatos y el fallo de la causa.

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Miradas, dudas y un profundo llanto fue una de las últimas imágenes que dejó la audiencia del viernes en la Sala III del Tribunal de Juicio del Poder Judicial en esta ciudad. Desde el miércoles pasado se desarrolla el debate oral y público por la muerte de Felipe Torres, el cambista de 57 años brutalmente asesinado el 5 de enero de 2017 en su oficina de calle España 618, la city salteña en pleno microcentro. Para hoy se espera que declare por primera vez Sebastián Lombardero Salas, imputado por el delito de "homicidio doblemente calificado criminis causa, alevosía y ensañamiento", y también Micaela Tobío, acusada de "encubrimiento agravado". Mientras que para mañana están previstos los alegatos y el fallo de la causa.

El móvil del crimen por el que Lombardero llegó a juicio, un brutal asesinato que a priori tuvo como fin el robo, trata de ser refutado por sus defensores, la doctora y codefensora María Eugenia Yaique y Marcelo Arancibia. La semana pasada la letrada señaló que dicho delito, el del robo, "se desvanece cada vez más". Al cambista Torres le faltaba nada menos que cerca de 1.200.000 pesos, que se presumen fueron sustraídos por el principal sospechoso.

En esos días y según consta en la causa, Lombardero realizó transacciones en un edificio ubicado en la calle Balcarce, cambió pesos por dólares para luego viajar en varias oportunidades a Bolivia donde volvió a cambiar divisas. Hay registros que antes del asesinato Lombardero venía realizando viajes al vecino país pero no con la periodicidad que lo hizo luego del crimen, según lo expuesto por el oficial principal Rodrigo Bautista, encargado de analizar las cámaras de video vigilancia y de otras cuestiones en la investigación, quien apuntó que "Lombardero tenía salidas el 6, 13 y 17 de enero hacia Bolivia", al mismo tiempo confirmó que su novia, Micaela Tobío, también tenía registradas salidas.

Una docena de testigos, aproximadamente, pasaron por el banquillo del Tribunal compuesto por las juezas Norma Beatriz Vera (presidenta interina), María Gabriela González y Carolina Sanguedolce (vocales). La presencia de un queso de cabra que fue encontrado en el monstruoso escenario del crimen, que con el transcurrir de las audiencias se pudo saber que fue entregado por Julio Calvetti porque al día siguiente ambos se reunirían en una casa de campo de la víctima; sentidas declaraciones con prolongadas lágrimas realizadas por familiares de Torres, su esposa Máxima Ofelia Peralta y su hijo, Felix Torres, hasta crudas imágenes que fueron expuestas por el profesional de la salud Daniel Chifire, médico encargado de la autopsia del cuerpo, fueron algunos momentos que se vivieron en la Sala III.

Pidió declarar

El viernes pasado la doctora Yaiqui, codefensora de Lombardero, expresó ante las magistradas la necesidad de su defendido de declarar. Sebastián Lombardero Salas, quien en varias oportunidades se lo vio negar algunas cuestiones en el desarrollo del debate, podría sentarse hoy ante las juezas y contar su verdad. En el primer día de audiencia, tanto él como Micaela Tobío, novios en el momento del crimen, apuntaron que declararían en el transcurso de las audiencias.

El salteño mató al cambista Torres de al menos 20 golpes entre feroces impactos con un elemento contundente en la cabeza -suponen se trató de un martillo- y puñaladas que penetraron en diferentes partes del cuerpo, según el médico Chirife las mortales pudieron haber sido la estocadas en la zona del cuello, torácica y abdominal.

“Todo sigue igual, no hay certezas”

Primero fue defensor de Lombardero, luego siguió pero solo con la defensa de su sobrina Micaela. El doctor Pablo Tobío apuntó: “Desde el año pasado no varió nada, sigue estando el gran interrogante del faltante de dinero en esa oficina. Son todas especulaciones, no hay un dato certero ni de la suma que se manejaba ni el lugar donde podría haber estado el dinero”.
Defiende a la joven acusada de “encubrimiento agravado”, y sostuvo: “Primero es mi trabajo y segundo, una carga y compromiso emocional muy grande. Sé a ciencia cierta que ella no tuvo nada que ver ni en la comisión del hecho ni a posterior con la tapadera del mismo”.
“Lo que queda entre lunes y martes es una discusión dogmática con fuerte contenido jurídico para saber, por ejemplo, si la muerte fue producto de alevosía y ensañamiento o no, y también si existió el robo”, apuntó el letrado.
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