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Todo listo para el juicio por la obra pública durante el kirchnerismo

Un total de 25 acusados se sentarán en el banquillo a partir del 30 de octubre.Empresarios, financistas y valijeros serán juzgados por “lavado de activos”.
Lunes, 17 de septiembre de 2018 00:00

El detenido Lázaro Báez imaginó a la expresidenta Cristina Kirchner sentada como testigo, con obligación de hablar bajo juramento de verdad, en el juicio oral por la "ruta del dinero K" que enfrentará desde el 30 de octubre. Por ello, sus abogados pidieron al Tribunal Oral Federal 4 convocarla en ese rol. La respuesta fue negativa.

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El detenido Lázaro Báez imaginó a la expresidenta Cristina Kirchner sentada como testigo, con obligación de hablar bajo juramento de verdad, en el juicio oral por la "ruta del dinero K" que enfrentará desde el 30 de octubre. Por ello, sus abogados pidieron al Tribunal Oral Federal 4 convocarla en ese rol. La respuesta fue negativa.

Casi en simultáneo, la expresidenta terminó citada, pero como acusada y a declaración indagatoria para el miércoles próximo a las 10.30 por Sebastián Casanello, el juez que aún investiga a otros involucrados en la multimillonaria maniobra de lavado de activos con las ganancias de la obra pública direccionada en el kirchnerismo.

Cristina acudirá a la indagatoria, presentará un escrito y se analiza si hablará o responderá preguntas al estar por primera vez ante Casanello,

Sus anteriores indagatorias fueron con otros magistrados, Claudio Bonadio -a quien no dirige la palabra- y Julián Ercolini, con quien tiene un trato más educado pero distante.

En el juzgado de Casanello, por las dudas, ya redactaron preguntas vinculadas a su vínculo con los Báez, con sus empresas y los manejos de dinero entre ambos.

Por lo pronto y sin Cristina en el banquillo, el 30 de octubre comenzará en los tribunales federales del barrio porteño de Retiro el debate por lavado de activos contra el empresario preso, sus cuatro hijos y otros 20 procesados.

Será el primer juicio oral por delitos vinculados al manejo de la obra pública en los gobiernos del matrimonio Kirchner con maniobras de lavado calculadas en 60 millones de dólares y récord de propiedades, automóviles de alta gama, aviones y dinero secuestrado.

En caso de condena firme, se abrirá el camino al recupero estatal de esos activos. Por ello el Tribunal ordenó realizar una actualización del valor de todo lo decomisado.

Además, tiempo atrás, autorizó la subasta pública de dos aviones con los que Lázaro Báez viajaba a Buenos Aires desde Río Gallegos y el importe obtenido quedó bajo custodia judicial.

Al bajar de una de esas aeronaves en el aeródromo de San Fernando en junio de 2016, quedó preso por orden de Casanello.

El dueño de "Austral Construcciones" será juzgado con sus hijos Martín, Melina, Luciana y Leandro; su detenido exabogado Jorge Chueco, su también preso excontador Daniel Pérez Gadín; el exmarido de la vedette Ileana Calabró, Fabián Rossi; el valijero devenido en arrepentido Leonardo Fariña y el financista Federico Elaskar, entre otros.

El caso de Fariña acaparará la atención en una época en que la seguidilla de imputados colaboradores se hizo habitual en Comodoro Py: el Tribunal tendrá que determinar si lo que aportó como arrepentido sirvió para esclarecer los hechos y en base a eso resolver si lo beneficia con reducción de pena a la hora de un eventual veredicto condenatorio.

Báez llegará esposado desde la cárcel de Ezeiza al primer juicio oral en su contra. El otrora empleado del banco de Santa Cruz mutado en empresario de la construcción apenas llegó Kirchner a la presidencia, intentó contar en el debate con un veedor de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y representantes del Centro de estudios legales y sociales (CELS).

Los jueces del Tribunal Néstor Costabel, Pablo Bertuzzi y Gabriela López Iñiguez le dijeron que no.

También rechazaron un planteo de su defensa para suspender el juicio y hacerlo en un futuro junto al de otras dos causas en las que está procesado junto a Cristina, pero siguen en etapa de investigación, Los Sauces y Hotesur. Ambas están vinculadas a supuestas maniobras de lavado de dinero mediante falsos alquileres a esas sociedades, propiedad de la familia Kirchner.

 Para el juicio por la llamada “ruta del dinero K”, el Tribunal aceptó en principio convocar a 91 testigos, sobre los más de mil que habían pedido las distintas partes: el fiscal Abel Córdoba, los acusados y las querellas de AFIP, Unidad de Información Financiera y Oficina Anticorrupción.
Los jueces rechazaron llamar a los empresarios Paolo Rocca, de Techint; Gerardo Ferreyra de Electroingeniería (ahora preso en la causa por los cuadernos K), a Franco Macri -padre del presidente Mauricio Macri-; al primo de este último Angelo Calcaterra, ex responsable de IECSA y ahora imputado colaborador también en la causa de los cuadernos del chofer Centeno.
Tampoco serán de la partida ante el rechazo del Tribunal los empresarios Eduardo Eurnekian, Enrique Wagner, Aldo Roggio y Juan Chediak, estos tres últimos también ahora involucrados en el escándalo de los cuadernos.
En el juicio que se prevé que durará no menos de seis meses se analizarán tres maniobras de lavado: 
La famosa filmación en la financiera SGI, conocida como “la rosadita” en Puerto Madero, donde se vio al mayor de los hijos de Báez, Martín a Rossi y a otros ahora acusados contando fajos de dólares por un total calculado en cinco millones.
Otra operación con bonos en el exterior como parte de un circuito que les posibilitó ingresar al país con apariencia lícita 33 millones de dólares y depositarlos en cuentas de la constructora Austral Construcciones.
Y por último, la existencia de depósitos en cuentas suizas calculados en 22 millones de dólares donde figuran como beneficiarios últimos los cuatro hijos de Báez.
Tres de los hijos de Báez, Melina, Luciana y Leandro deberán viajar desde Río Gallegos hasta la ciudad de Buenos Aires para estar presentes de manera obligatoria en el juicio al menos en el inicio, lectura de acusaciones y etapa de declaraciones indagatorias. 
El Tribunal dispuso que se les realice un informe socioambiental en sus residencias en esa ciudad santacruceña.
También se pidieron informes sobre pólizas de seguro de siete autos de alta gama, Audi, Porsche, BMW, Mini Cooper, secuestrados en la causa y se encomendó una pericia a Gendarmería Nacional sobre computadoras, pen drives y otros dispositivos secuestrados en allanamientos.
Desde el 26 de febrero del año próximo, Báez tendrá que asistir a dos juicios en simultáneo: el de la ruta del dinero K y el que iniciará ese día por la adjudicación a favor de sus empresas del 80 por ciento de la obra pública en Santa Cruz en el kirchnerismo.
En este debate sí estarán junto a él en el banquillo de los acusados la expresidenta y actual senadora Kirchner y los detenidos exministro de Planificación Federal Julio De Vido y el exsecretario de Obra Pública José López, entre otros acusados.
El juicio comenzará el 30 de octubre, pero todavía está en duda si uno de los jueces, Bertuzzi, integrará el Tribunal o será reemplazado. Bertuzzi fue designado esta semana por el Consejo de la Magistratura de la Nación como nuevo integrante de la sala I de la Cámara Federal porteña, el Tribunal de Apelaciones que revisa todas las decisiones de los doce juzgados de instrucción del fuero.

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