Los estudiantes del Instituto Santa Ana y San Joaquín realizaron un festejo con banderazo sobre el Monumento a los Caídos de la Policía Federal, en el barrio porteño de Belgrano. Arriba de la estatua, los jóvenes hicieron “la previa” a una fiesta, y se filmaron tomando alcohol, bailando y riéndose.
inicia sesión o regístrate.
Los estudiantes del Instituto Santa Ana y San Joaquín realizaron un festejo con banderazo sobre el Monumento a los Caídos de la Policía Federal, en el barrio porteño de Belgrano. Arriba de la estatua, los jóvenes hicieron “la previa” a una fiesta, y se filmaron tomando alcohol, bailando y riéndose.
La escena se viralizó en las redes sociales y despertó el malestar en el ministerio de Seguridad, que pidió una reunión urgente con los directivos del colegio. La situación, además, provocó la indignación de los familiares e integrantes de la Policía Federal.
En las filmaciones se ve a los jóvenes tomar alcohol y saltar arriba de las placas de los caídos, además de “adornar” el monumento con banderas, lo que también generó la bronca de otros usuarios en las redes sociales. Algunos pidieron una sanción judicial y otros consideraban que se trata de un hecho que amerita un castigo penal.
Fuentes judiciales y policiales informaron que “la previa” fue denunciada ante la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas número 8, a cargo de Leandro Noguera, pero el secretario de la misma, Maximiliano Vence, dispuso “no adoptar temperamento alguno” por este episodio.
Ante esta situación, miembros de la cúpula de la Policía Federal y funcionarios pidieron “una reunión urgente” con los directivos de la escuela para tratar el tema y “evitar” así que vuelvan a llevarse a cabo festejos de ese tipo en el Monumento, “tanto los estudiantes de ese colegio como de otros establecimientos educativos que busquen imitarlos”.
El rector del Instituto Santa Ana y San Joaquín, Walter Belbey, le informó a La Nación que los jóvenes involucrados deberán investigar y estudiar las vidas de las víctimas. “Estamos angustiados por lo que sucedió. Lo que hicieron los alumnos no representa el sentir ni los valores de la institución”, explicó el directivo.
La escuela está en la Avenida del Libertador, entre Olazábal y Mendoza, a unas diez cuadras del monumento, que en algunas oportunidades cuenta vigilancia policial para evitar actos de vandalismo.