Un fuerte ajuste realizan las familias en las compras del supermercado. Salta está entre las cinco jurisdicciones con peores ventas interanuales, según difundió el Indec esta semana.
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Un fuerte ajuste realizan las familias en las compras del supermercado. Salta está entre las cinco jurisdicciones con peores ventas interanuales, según difundió el Indec esta semana.
Al comparar noviembre de 2017 con el mismo mes de 2018, los ingresos económicos en las sucursales aumentaron solo un 20,2%. No es ni la mitad de la inflación anual para ese período, que llegó a 48,5%.
El desplome fue fuerte, según remarcaron fuentes consultadas del sector, y no vislumbran que haya una mejora en estos primeros días del 2019. Las ventas a nivel nacional se incrementaron un 33% en términos corrientes, sin tener en cuenta a la inflación. De ese modo, la caída fue de 12,5% en términos reales.
Aunque gastaron un 20% más, los consumidores salteños en los supermercados recortaron los gastos en juguetes, libros, artículos ferretería, plantas y otros productos que no son de primera necesidad y que en los últimos años habían ganado terreno en las góndolas y pasillos.
Agrupados por el Indec bajo el rubro "otros", hubo una contracción en las ventas del 27,1% en Salta, esto sin tener en cuenta el impacto de la inflación, por lo que el impacto es mucho más negativo.
Con una reducción del 25,5%, se hundió la comercialización de comidas preparadas o "para llevar" y con un 22 por ciento menos, la de electrodomésticos.
Pese a las ofertas, no hubo un "boom" de los equipos de aire acondicionado.
De los once rubros que analiza el organismo estadístico, solo uno superó la barrera de la inflación.
El alza en el sector bebidas fue del 51%. Un saldo negativo registra el rubro limpieza, ya que el incremento de las ventas corrientes en noviembre fue del 43,9%.
Aunque algunos ingresos hayan crecido más del 40% como en el caso de los productos de almacén, lo cierto es que los clientes cargan menos alimentos en el changuito.
Provincias del norte son las que peores resultados tuvieron. Además de Salta, con el 20,2%, figuran Santiago del Estero (19,7%), Jujuy (19,3%), Tucumán (17,0%) y Chaco (16,9%).
En un relevamiento que publicó días atrás la Subsecretaría de Defensa del Consumidor de la Municipalidad, un paquete de harina de un kilo de una marca promedio costaba entre 25 y 27 pesos.
La brecha es más amplia al hacer una comparación internanual. Todos los meses Defensa del Consumidor realiza un relevamiento en ocho supermercados.
En enero de 2018, la compra más cara de 41 productos de primeras marcas demanda hasta 2.302 pesos. En el informe de este mes, la adquisición de esos productos cuesta hasta 3506 pesos. Se trata de un incremento del 52%.
El relevamiento se hace sobre los precios de productos de marcas reconocidas, así como también los precios de productos más económicos. Estos se enmarcan fuera de la canasta familiar y forman parte de un listado en los rubros de panificación, almacén, carnicería, lácteos, perfumería y limpieza.
Entre los cortes de carne, el kilo de tapa de asado cuesta entre $139,90 y $239. El kilo de cuadrada cuesta entre $189,90 y $276. El precio del kilo de costeleta de cerdo oscila entre $129 y $203.