El Núcleo Educativo Rubén Darío N§ 7021 contiene a más de doscientos alumnos, distribuidos en aulas satélite en diferentes puntos de la Ciudad Termal. El mismo cumplió en junio pasado sesenta años en la comunidad rosarina, con el objetivo de alfabetizar a todas las personas a partir de los catorce años sin límite de edad, que por alguna razón no lograron empezar o finalizar la educación primaria. El martes, en la Casa de la Cultura, se realizó una exposición de los diferentes trabajos que se realizan en los talleres a lo largo del ciclo lectivo. En este caso, objetos de uso diario con materiales reciclables y trabajo de electricidad.
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El Núcleo Educativo Rubén Darío N§ 7021 contiene a más de doscientos alumnos, distribuidos en aulas satélite en diferentes puntos de la Ciudad Termal. El mismo cumplió en junio pasado sesenta años en la comunidad rosarina, con el objetivo de alfabetizar a todas las personas a partir de los catorce años sin límite de edad, que por alguna razón no lograron empezar o finalizar la educación primaria. El martes, en la Casa de la Cultura, se realizó una exposición de los diferentes trabajos que se realizan en los talleres a lo largo del ciclo lectivo. En este caso, objetos de uso diario con materiales reciclables y trabajo de electricidad.
El Núcleo tiene un total de doce aulas satélite que están distribuidas en toda la ciudad de Rosario de la Frontera, en diferentes instituciones, en horarios nocturnos, y también funciona un aula en la localidad de El Tala.
"Nuestro principal objetivo es llegar a todos los hogares donde esté la demanda educativa para alfabetizar, por ello es que las aulas están distribuidas en los diferentes barrios, en el Ramón Abdala tenemos tres aulas. También tenemos un aula en Villa Josefina, en la escuela Jorge Edgar Leal, dos más en sede en la escuela Pachi Gorriti, una en la Manuela Pedraza, otra más en el comedor del barrio Santa Ana y un aula en el barrio San Martín", señaló Griselda Iturre, directora del Núcleo 7021.
Cabe destacar que las aulas también se trasladaron al asilo de ancianas: "Tratamos de llevar nuestra escuela a cualquier lugar donde esté la demanda educativa". Respecto a la cantidad total de alumnos dijo: "Tenemos 240 alumnos entre jóvenes y adultos".
Inscripciones todo el año
El ciclo lectivo funciona a partir de marzo hasta diciembre; respecto a eso, la directora informó que "nosotros tenemos una inscripción abierta durante todo el año, lo que significa que quienes lo deseen pueden inscribirse en cualquier momento del año para ingresar a cualquiera de las aulas que le quede más cómodo, incluso si lo desean pueden anotarse hasta en diciembre y con la oportunidad de continuar al año siguiente".
En cuanto a los docentes que están a cargo, Iturre señaló: "Tenemos un total de veinte personas, entre la dirección y la vicedirección, dos celadoras titulares y los cuatro talleristas; también tenemos doce docentes titulares, donde trabajan de manera entusiasta, y lo más importante es que todos están capacitados, hace ya cinco años que todos nos venimos capacitando de manera continua a través de la Dirección General Permanentes de Jóvenes y Adultos, quienes nos brindan toda la capacitación necesaria para trabajar con ellos, ya que no es lo mismo enseñar a los niños que a los adultos, hay que tener en cuenta que son adultos que ya traen todo un cúmulo de conocimientos, tienen toda una vida recorrida".
Respecto al cómo es aprender ya de adulto, la directora destacó que "es de no creer la predisposición que tienen, sobre todo el adulto mayor es quien más responsable se siente con respecto a recurrir a las clases, hacer sus tareas y, sobre todo, acompañar a sus docentes".
"En un aula tenemos gente del primer ciclo, que es para los que recién se están alfabetizando, luego tenemos el segundo el tercer ciclo que es para los que ya están finalizando. De todos modos, más allá de que sean tres años el total, todo depende de cada uno, de lo que ellos vayan avanzando y de los objetivos que ellos mismos se proponen. Tenemos gente grande que incluso está terminando su tercer ciclo (lo que representa el séptimo grado) para luego ingresar al BSPA, que es educación secundaria".
Finalmente dijo: "Hay que mostrar lo que hacemos para incentivar a sumarse a todas las personas que piensan que ya están grandes para comenzar o terminar sus estudios".