Alrededor del Colegio Santa María de Caballito es todo era preocupación por el ataque que sufrieron el martes alumnos de 1° y 2° año por parte de una patota de al menos siete jóvenes. Los esperaron en el horario de salida,pleno mediodía, armados con palos y cadenas.
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Alrededor del Colegio Santa María de Caballito es todo era preocupación por el ataque que sufrieron el martes alumnos de 1° y 2° año por parte de una patota de al menos siete jóvenes. Los esperaron en el horario de salida,pleno mediodía, armados con palos y cadenas.
Gritos, golpes y corridas. Durante minutos la calle Senillosa al 500 se convirtió en escenario de un ataque brutal y confusión. Un vecino pudo captar toda la secuencia desde el balcón de su edificio con un teléfono celular y el video es ahora una de las pruebas con las que cuenta la Justicia.
La denuncia por la brutal agresión la presentaron en las últimas horas los padres de dos de los chicos atacados y el hecho será investigado por la Fiscalía Penal contravencional Nº 26, a cargo de Luis Arnaudo.
Los agresores, que de acuerdo al relato de los denunciantes, son chicos de otras escuelas que suelen reunirse en el parque Rivadavia y antes de irse corriendo del lugar prometieron volver. Es por eso que las autoridades del establecimiento se comprometieron a ubicar personal policial en los horarios de entrada y salida de los alumnos para evitar nuevos episodios.