Luis Scola, presentado ayer como nuevo jugador del Olimpia Milán, aseguró que si no se hubiera clasificado con Argentina para los Juegos de Tokio 2020 se habría retirado tras el último Mundial y que la propuesta del equipo milanés le pareció la más ilusionante para seguir compitiendo.
“No voy a seguir jugando mucho tiempo, estoy en el tramo final de mi carrera. Si no nos hubiéramos clasificado para los Juegos me habría retirado, era una decisión que tomé antes del Mundial”, afirmó Scola durante su rueda de prensa de presentación.
“Hablé con mi familia y fueron los primeros en animarme a seguir. He tenido muchas opciones y Milán me pareció la mejor”, prosiguió.
El alero argentino, que fue finalista en el último Mundial con un promedio de 17,9 puntos por partido, aseguró además que tenía ganas de trabajar con el técnico Ettore Messina.
“Conozco la historia de este equipo, me gustan los desafíos y acepté uno que me parecía divertido. Pero uno de los factores determinantes fue Messina. Quería jugar para él, porque en el pasado nunca se dio la oportunidad”, explicó el único integrante de la Generación Dorada que sigue en actividad.
“El hecho de que Messina me haya buscado antes del Mundial es una de las razones por las que dije que sí”, añadió.
Scola volverá a competir en la Euroliga, que no disputa desde 2007, y destacó que el torneo “ha crecido tremendamente” en los últimos años.
“Dejé la Euroliga hace trece años y desde entonces ha crecido tremendamente, tanto a nivel de juego como a nivel de lo que hay a su alrededor. Creo que se está acercando a la NBA. Necesitaré un tiempo para adaptarme, pero no creo que haya problemas”, aseguró el capitán del seleccionado argentino en el último Mundial jugado en China.
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Luis Scola, presentado ayer como nuevo jugador del Olimpia Milán, aseguró que si no se hubiera clasificado con Argentina para los Juegos de Tokio 2020 se habría retirado tras el último Mundial y que la propuesta del equipo milanés le pareció la más ilusionante para seguir compitiendo.
“No voy a seguir jugando mucho tiempo, estoy en el tramo final de mi carrera. Si no nos hubiéramos clasificado para los Juegos me habría retirado, era una decisión que tomé antes del Mundial”, afirmó Scola durante su rueda de prensa de presentación.
“Hablé con mi familia y fueron los primeros en animarme a seguir. He tenido muchas opciones y Milán me pareció la mejor”, prosiguió.
El alero argentino, que fue finalista en el último Mundial con un promedio de 17,9 puntos por partido, aseguró además que tenía ganas de trabajar con el técnico Ettore Messina.
“Conozco la historia de este equipo, me gustan los desafíos y acepté uno que me parecía divertido. Pero uno de los factores determinantes fue Messina. Quería jugar para él, porque en el pasado nunca se dio la oportunidad”, explicó el único integrante de la Generación Dorada que sigue en actividad.
“El hecho de que Messina me haya buscado antes del Mundial es una de las razones por las que dije que sí”, añadió.
Scola volverá a competir en la Euroliga, que no disputa desde 2007, y destacó que el torneo “ha crecido tremendamente” en los últimos años.
“Dejé la Euroliga hace trece años y desde entonces ha crecido tremendamente, tanto a nivel de juego como a nivel de lo que hay a su alrededor. Creo que se está acercando a la NBA. Necesitaré un tiempo para adaptarme, pero no creo que haya problemas”, aseguró el capitán del seleccionado argentino en el último Mundial jugado en China.
Su trayectoria
Scola, nacido en Buenos Aires en 1980, llega a Milán tras jugar las últimas dos temporadas en el Shanxi Zhongyu y en el Shangai Sharks chinos, y tras lucirse con un promedio de 17,9 puntos y 8,1 rebotes por partido en el último Mundial, en el que perdió la final contra España.
El argentino empezó su carrera en Ferro Carril Oeste y de allí se marchó a España, donde jugó con el Baskonia de Vitoria y con el que conquistó dos ligas, tres Copas del Rey y dos Supercopas.
Después, empezó una experiencia en la NBA estadounidense, en la que jugó con Houston, Phoenix, Indiana, Toronto y Brooklyn, con los que disputó 780 partidos con 12 puntos de promedio por encuentro.