La crisis social y política en Chile no se detiene. Los incidentes en el país vecino se prolongaron hoy nuevamente, con foco principal en Santiago, donde se produjeron enfrentamientos entre manifestantes y carabineros, saqueos, destrozos de viviendas y comercios.
El epicentro fue nuevamente la Plaza Italia, donde hasta esta noche continuaban los disturbios entre grupos radicalizados y los carabineros, en tanto, una vez más parte de esos manifestantes intentaron ingresar a la Embajada argentina, pero en esta ocasión la presencia del grupo Alacrán, de Gendarmería Nacional, los persuadió.
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La crisis social y política en Chile no se detiene. Los incidentes en el país vecino se prolongaron hoy nuevamente, con foco principal en Santiago, donde se produjeron enfrentamientos entre manifestantes y carabineros, saqueos, destrozos de viviendas y comercios.
El epicentro fue nuevamente la Plaza Italia, donde hasta esta noche continuaban los disturbios entre grupos radicalizados y los carabineros, en tanto, una vez más parte de esos manifestantes intentaron ingresar a la Embajada argentina, pero en esta ocasión la presencia del grupo Alacrán, de Gendarmería Nacional, los persuadió.
En el día 26 de protestas y mientras el presidente Sebastián Piñera citaba a su gabinete y avanzaba en la posibilidad de una reforma constitucional, se reiteraron los destrozos y múltiples incidentes, con manifestantes que armaron barricadas de fuego, al tiempo que eran reprimidos con gases lacrimógenos.
También volvieron a aflorar las bombas molotov arrojadas contra los móviles de las fuerzas de seguridad, particularmente contra un camión de los carabineros que fue atacado por un nutrido grupo.
Piñera anunció el martes una reforma constitucional y anticipó que, mientras tanto, reincorporará oficiales retirados de Carabineros y de la policía de investigaciones para fortalecer la seguridad.
"A pesar de todos los esfuerzos, el orden público ha sido vulnerado y la seguridad ciudadana no ha sido respetada", indicó el mandatario al anunciar la convocatoria a los reservistas.
No obstante, la oposición de sus propios funcionarios de Gabinete frenó por el momento la salida de los militares a la calle.
Una Asamblea Constituyente para llevar adelante ese cambio se consolida como la gran apuesta de la oposición y grupos sociales para descomprimir el estallido social. Con 22 muertos, miles de heridos y considerables daños al comercio y varios edificios patrimoniales, la crisis social arrastró al peso chileno a su menor valor tras cotizarse en 794,97 unidades por dólar.