La modelo Heidi Klum lo ha vuelto a hacer. Un año más, arrasó con su disfraz de Halloween con el que era imposible poder reconocerla. En esta ocasión, la modelo quiso que todo el mundo fuese testigo de su transformación y a través de sus redes sociales avisaba que estaría preparándose en un escaparate del centro de Manhattan. Un proceso que duró un total de diez horas y donde se pudo apreciar cómo la modelo pasaba a transformarse poco a poco en un engendro biónico que le daba un aspecto terrorífico y que conseguía convertirla, una vez más, en la reina de Halloween.
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La modelo Heidi Klum lo ha vuelto a hacer. Un año más, arrasó con su disfraz de Halloween con el que era imposible poder reconocerla. En esta ocasión, la modelo quiso que todo el mundo fuese testigo de su transformación y a través de sus redes sociales avisaba que estaría preparándose en un escaparate del centro de Manhattan. Un proceso que duró un total de diez horas y donde se pudo apreciar cómo la modelo pasaba a transformarse poco a poco en un engendro biónico que le daba un aspecto terrorífico y que conseguía convertirla, una vez más, en la reina de Halloween.
Decenas de fotógrafos y seguidores pudieron ver cómo los maquilladores y peluqueros transformaban a la modelo utilizando prótesis para proporcionarle caderas más anchas y grandes pechos. Un aspecto muy terrorífico que se hizo posible gracias a un traje de silicona que la modelo se puso delante de todos los asistentes que quisieron presenciar su transformación. Un cambio que le costó conseguir, nada más y nada menos, que 13 horas!
Sus millones de seguidores se volvieron completamente locos y no pudieron dejar de comentar lo asombroso del resultado.
Klum hizo su aparición ante el público presente en el Annual Halloween Bash en una cápsula espacial junto a su esposo Tom Kaulitz, quien en un traje espacial destruido por completo parece haber sido atacado por el horripilante humanoide interpretado por su esposa.