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El 80% de los madereros no espera que mejore la economía

En el sector hablan de una caída sin precedentes de ventas y producción.El 2018 cerró con 11,5% menos de ventas y la producción de muebles se contrajo un 37,5%.
Martes, 19 de febrero de 2019 02:31

El Observatorio de la Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines (Faima) puso en evidencia la fuerte caída de actividad que tuvo el sector maderero en los últimos meses.

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El Observatorio de la Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines (Faima) puso en evidencia la fuerte caída de actividad que tuvo el sector maderero en los últimos meses.

La producción de madera y muebles se contrajo un 8,9% en 2018. La industria del mueble es el segmento más afectado, mostrando una baja del 11,5% en su nivel de producción, mientras que la producción de madera cayó 1,3%.

La caída del consumo es el principal factor que explica esta dinámica. El ritmo de deterioro en los últimos meses del año no tiene precedentes. La industria mueblera se contrajo 37,5% interanual en diciembre, mientras que la de madera y sus manufacturas 16,7%.

Según estimaciones de Faima, el nivel de producción con que el sector cerró 2018 es un 12% inferior al del 2015. Los datos se desprenden en base al IPI-

Indec y a relevamientos propios.

Estos indicadores se verifican en la opinión de las empresas. Los datos definitivos de la encuesta anual del Observatorio Faima muestran que el 74% de las empresas señala que cayó su producción en 2018. El 72% manifiesta que sus ventas cayeron y el 44% espera que la situación empeore en 2019.

El presidente del Centro de Obrajeros del Norte, Miguel Loutayf, se mostró muy pesimista con el futuro del sector y dijo: "Nosotros somos una de las 28 cámaras que integran Faima y las cifras que dio a conocer son muy preocupantes.

Otro dato negativo que arrojó el relevamiento es que, a diferencia de la recesión de 2016, el actual ciclo contractivo está teniendo un impacto notorio en el empleo, dado que el 30% de las empresas encuestadas señaló que disminuyó su dotación de personal. Este dato es llamativo dado el carácter de mano de obra intensiva y de personal calificado difícil de reemplazar que tiene el sector, dato que se correlaciona con un bajo uso de la capacidad instalada.

"Necesitamos políticas de estado, necesitamos medidas para atravesar la crisis. Medidas recientes como el incremento de la tasa de interés en las tasas de mora de AFIP solo ponen más presión a sectores exigidos al máximo y que operan por debajo de un umbral mínimo de rentabilidad", agregó el presidente del Centro de Obrajeros de Orán.

Causas e incidencias

La caída de las ventas en el mercado local, sumado a los aumentos de costos asociados a tarifas de servicios, tasas de interés en niveles récord y algunos insumos dolarizados, condicionan la rentabilidad del sector. En este marco, las pymes se ven obligadas a liquidar stocks por debajo de umbrales mínimos de rentabilidad para cubrir huecos financieros de corto plazo, lo cual se vuelve un círculo vicioso que redunda en menor uso de su capacidad instalada, suspensiones y despidos.

En este escenario tan grave para toda la industria manufacturera, es necesario que se instrumenten medidas que ayuden a las pymes a atravesar la crisis, en transición hacia un escenario de recuperación.

"Nuestra cámara más que protestas hace propuestas, por eso seguimos apostando a la capacitación, porque queremos un norte grande, insistiendo con las casas canadienses y el vivero municipal", remarcó Loutaif.

Faima participa de tres mesas sectoriales con autoridades del Gobierno nacional, siendo la principal la Mesa de Competitividad Foresto Industrial.

 

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