La Municipalidad de El Potrero encaró una obra anhelada por toda la comunidad de Antillas para evitar que se inunde el acceso al pueblo cada vez que hay tormentas.
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La Municipalidad de El Potrero encaró una obra anhelada por toda la comunidad de Antillas para evitar que se inunde el acceso al pueblo cada vez que hay tormentas.
Se trata de un importante desage que recepcionará el agua de lluvia para evitar los problemas seculares que sufre el pequeño poblado rosarino. El intendente Mur expresó a El Tribuno que "esta obra es prioritaria para nuestro municipio y va a evitar el desborde de agua cada vez que llueva".
También, el jefe comunal, aseveró que "el canal de derivación, obra que finaliza estos días, va a impedir además, el ingreso de agua cuando llueve por los cerros aledaños a Antillas".
Con esa nueva canalización, se evitarán las recurrentes inundaciones de la avenida Argentina, que es la calle de acceso, lo que afecta al pueblo antillense en general.
Eternos disconformes
Sin embargo, unos vecinos de la localidad cuestionaron la forma en la que se está ejecutando la obra.
Cabe destacar que la problemática que lleva décadas afectando a los vecinos de Antillas: cada vez que llueve con intensidad quedan aislados porque el acceso al pueblo se inunda por completo y corre gran cantidad de agua por el sector.
Videos que se viralizaron en las redes sociales en las últimas semanas, dan cuenta de la gravedad de la situación y el corte total de la avenida Argentina.
También circularon imágenes de las obras de canalización, en las cuales muchos vecinos cuestionan las obras.
"Esas obras están mal realizadas, están hechas cerca del cementerio y eso significa que el cementerio va a desaparecer", manifestaron.
Las peores consecuencias las viven los vecinos que residen en la zona, quienes recuerdan graves inundaciones y piden soluciones a la problemática que lleva décadas sin solución.
Mercedes Luna, José Chiple y Rosa de Ramírez, vecinos de Antillas, integrantes del Apostolado de Fátima, manifestaron a El Tribuno que "esto antes era una calle, una ruta provincial, pero las lluvias la destruyeron y ahora es un río cuando hay tormentas, por eso no entra ni sale nadie, pero lamentablemente ya estamos acostumbrados".
"Este problema ya tiene muchos años, solo que ahora se agravó, porque además de las lluvias, toda el agua de las fincas, sale por esta calle, y los dueños tendrían que arreglar para que el agua no salga por acá, las fincas rodean el pueblo, los dueños no son de acá, y la verdad que rompen todo, los zanjones, además, abundan en la ruta", informaron.
"El acceso hacia la ruta, ya lo tendrían que haber arreglado hace mucho, o por lo menos tirar un poco de ripio", reclamaron.
Canal a cielo abierto
Efectivamente la antigua ruta, ahora avenida Argentina, se transformó en una especie de canal a cielo abierto.
Está lleno de malezas y da hacia el fondo de varias casas de la localidad.
El agua circula con fuerza por la pendiente cada vez que llueve con intensidad, corta la avenida Argentina (principal acceso del pueblo) y siguen su recorrido hasta la ruta nacional 34, donde hay un desage a bajo nivel, que ya tiene grandes socavones debido a la fuerza y la cantidad de agua. La Municipalidad piensa solucionar todo eso.