Los Patriots de Nueva Inglaterra se proclamaron campeones de la 53 edición del Super Bowl al vencer por 13-3 a los Rams de Los Angeles en el partido que se disputó anoche en el estadio Mercedes-Benz de Atlanta, con una asistencia de 77.000 espectadores.
El corredor novato Sony Michel hizo el único “touchdown” del partido cuando faltaban 7 minutos para el final del tiempo reglamentario con un avance de dos yardas y el pateador Stephen Gostkowski, que ya había anotado el primer gol de campo de los Patriots, concretó el punto extra.
Gostkowski también hizo el gol de campo de 41 yardas que sentenció el partido.
El título fue el sexto que consiguen los Patriots (2002, 2004, 2005, 2015, 2017 y 2019), en los 11 Super Bowls que han disputado, todos bajo la dirección del entrenador en jefe Bill Belichick y el mariscal de campo Tom Brady, que les permite empatar con los Steelers de Pittsburgh como los mejores en la historia de la NFL.
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Los Patriots de Nueva Inglaterra se proclamaron campeones de la 53 edición del Super Bowl al vencer por 13-3 a los Rams de Los Angeles en el partido que se disputó anoche en el estadio Mercedes-Benz de Atlanta, con una asistencia de 77.000 espectadores.
El corredor novato Sony Michel hizo el único “touchdown” del partido cuando faltaban 7 minutos para el final del tiempo reglamentario con un avance de dos yardas y el pateador Stephen Gostkowski, que ya había anotado el primer gol de campo de los Patriots, concretó el punto extra.
Gostkowski también hizo el gol de campo de 41 yardas que sentenció el partido.
El título fue el sexto que consiguen los Patriots (2002, 2004, 2005, 2015, 2017 y 2019), en los 11 Super Bowls que han disputado, todos bajo la dirección del entrenador en jefe Bill Belichick y el mariscal de campo Tom Brady, que les permite empatar con los Steelers de Pittsburgh como los mejores en la historia de la NFL.
El gran partido final fue una lucha defensiva durante los primeros tres cuartos, donde únicamente se vieron un par de goles de campo que dejaron la pizarra 3-3 para firmar el único Super Bowl sin touchdowns antes del último episodio. Fue en el desenlace que apareció la mano de la experiencia. Con 7:40 en el reloj Tom Brady lanzó un pase de 29 yardas para que Rob Gronkowski pusiera a los Pats en la zona roja. En la jugada inmediata Sony Michel abrió una ventaja que sería definitiva con un acarreo de 2 yardas. Tras la anotación de Nueva Inglaterra vinieron un par de jugadas clave: la intercepción de Stephon Gilmore a Jared Goff con 4:20 en el reloj; y un gol de campo de 41 yardas por parte de Stephen Gostkowski, que puso contra las cuerdas a sus rivales con el 13-3 final. Todavía hubo tiempo para un gol de campo fallido por parte de los Rams, pero ya nada importaba: la leyenda de Tom Brady y sus Pats subió a lo más alto de la NFL, donde igualaron a los Steelers como las franquicias más ganadoras.
La edición LIII es el Super Bowl con menos puntos en la historia, desbancando a la edición VII en la que los Dolphins de Miami vencieron 17-7 a los Redskins de Washington.
Más que un partido
El Súper Bowl fue más que un partido de fútbol americano. Es el espectáculo por excelencia de los estadounidenses, en el que pagaron 5 millones de dólares por 30 segundos de televisión, se consumieron 1.300 millones de alitas de pollo. Se tata del evento de los eventos y un emblema para la cultura pop y el deporte.
Además, más de 100 millones de televisores conectaron en EE.UU. con la gran final, una cita anual que desborda el ámbito deportivo y se convierte en un gran evento que, en cierto modo, paraliza al país en una fiesta que celebra lo más reconocible de la cultura de masas estadounidense.