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El Papa endurece las leyes contra los abusos en el Vaticano

Se castigará con multas y cárcel al personal y diplomáticos de la Santa Sede que no denuncien. Y espera que esto sirva de ejemplo a las Conferencias Episcopales de todo el mundo.
Viernes, 29 de marzo de 2019 14:05

 En medio de la crisis que atraviesa por el escándalo de abusos sexuales a menores por parte del clero estallado en diversas partes del mundo, tal como se había anunciado al término de la cumbre sobre el tema que hubo a fines de febrero en el Vaticano, Francisco promulgó hoy una nueva y amplia legislación para contrastar este delito en su propia casa, es decir, en la curia romana y en el Vaticano. La nueva ley obliga a quien tenga noticias de abusos de menores a denunciarlos "sin retraso" y crea un "servicio de acompañamiento para las víctimas", que estará a cargo de un experto que deberá escucharlas, acompañarlas y ayudarlas en el proceso judicial.

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 En medio de la crisis que atraviesa por el escándalo de abusos sexuales a menores por parte del clero estallado en diversas partes del mundo, tal como se había anunciado al término de la cumbre sobre el tema que hubo a fines de febrero en el Vaticano, Francisco promulgó hoy una nueva y amplia legislación para contrastar este delito en su propia casa, es decir, en la curia romana y en el Vaticano. La nueva ley obliga a quien tenga noticias de abusos de menores a denunciarlos "sin retraso" y crea un "servicio de acompañamiento para las víctimas", que estará a cargo de un experto que deberá escucharlas, acompañarlas y ayudarlas en el proceso judicial.

Para potenciar el cuadro normativo, el Papa firmó tres documentos: una carta apostólica en forma de "Motu Proprio" (carta por decisión propia) sobre la protección de menores y de las personas vulnerables; una ley para el Estado de la Ciudad del Vaticano y la Curia romana; y líneas-guía para el Vicariato de la Ciudad del Vaticano. Entrarán en vigor el 1 de junio próximo.

Como explicó el director editorial del Dicasterio para las Comunicaciones, Andrea Tornielli, se trata de leyes, normas e indicaciones muy específicas, relativas solo al Estado Vaticano, donde trabajan muchos sacerdotes y religiosos, pero donde hay pocos niños. "Aunque fueron pensadas y escritas para una realidad única en el mundo, en la que la máxima autoridad religiosa es también el soberano y legislador, estos tres documentos contienen indicaciones ejemplares que incluyen los más avanzados parámetros internacionales", destacó Tornielli.

"La tutela de los menores y de las personas vulnerables forma parte integral del mensaje evangélico que la Iglesia y todos sus miembros están llamados a difundir en el mundo", afirma el Papa al comienzo del "motu proprio", que refuerza el conjunto de normas para prevenir y contrastar los abusos contra menores en la curia romana y en el Vaticano.

En el documento, Francisco llama a que "madure en todos la consciencia de tener que señalar los abusos a las autoridades competentes y de cooperar con las mismas"; que "sea perseguido cada abuso"; que las víctimas sean debidamente recibidas, escuchadas y acompañadas; que al imputado se le garantice un juicio ecuo e imparcial, en el respeto de la presunción de inocencia; que sea removido de su cargo la persona condenada de haber abusado de un menor o de una persona vulnerable y que al mismo tiempo le sea ofrecido un apoyo para la rehabilitación psicológica y espiritual; y que se ofrezca una formación adecuada para la tutela de menores y de las personas vulnerables.

Qué dice la legislación

Tal como subrayó Tornielli, entre las novedades de la consecuente ley sobre protección de menores, que equipara a los menores con los adultos vulnerables, está el hecho de que de ahora en más, todos los delitos relacionados con el abuso a menores, no solo de tipo sexual, sino también, por ejemplo, maltratos, serán "perseguibles de oficio", es decir, aún sin una denuncia.

La segunda novedad se encuentra en la introducción de una prescripción de 20 años, que empieza a correr a partir del cumplimiento de los 18 años del menor ofendido, explicó Tornielli, que recordó que no se trata de leyes canónicas, sino de leyes penales del Estado de la Ciudad del Vaticano que habían quedado rezagadas.

Otra novedad es la obligación de denunciar y la sanción para quien omite señalar a la autoridad judicial vaticana la existencia de abusos. La ley habla de una multa de 1000 a 5000 euros y de penas de hasta 6 meses de prisión.

Finalmente la ley prevé la creación, de parte del Governatorato, en el marco de la Dirección vaticana de Sanidad e Higiene, de un Servicio de Acompañamiento para las víctimas de abusos, que será coordinado por un experto. "Las víctimas tendrán, por lo tanto, alguien a quien dirigirse para encontrar ayuda, recibir asistencia médica y psicológica, ser puestas en conocimiento de sus derechos y cómo hacerlos valer", explicó Tornielli.

Alessandro Gisotti, director interino de la Sala de Prensa, subrayó que se trata de "tres documentos de gran importancia que responden a la exigencia de pasos concretos manifestada por el Pueblo de Dios en el enfrentar la plaga de los abusos a menores". También aseguró que "se trata del primer paso importante como consecuencia" de la cumbre de febrero pasado, en la que participaron los presidentes de todas las conferencias episcopales del mundo, algo sin precedente.

"Significativamente, los tres documentos han sido firmados por el Santo Padre. Estos actos refuerzan la protección de menores a través de la potenciación del cuadro normativo", agregó. "El Santo Padre desea que - también gracias a estas normas que conciernen al Estado de la Ciudad del Vaticano y la Curia Romana - madure en todos la conciencia que la Iglesia deba ser cada vez más una casa segura para los niños y las personas vulnerables", concluyó.

Fuente La NAción

 

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