Una semana después, los equipos que abrieron la novena edición de la Summer Cup de béisbol se volvieron a enfrentar en la semifinal de la competencia disputada en el diamante de Popeye.
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Una semana después, los equipos que abrieron la novena edición de la Summer Cup de béisbol se volvieron a enfrentar en la semifinal de la competencia disputada en el diamante de Popeye.
Los equipos de Cachorros y Popeye Bordó jugaron tras un sentido homenaje a Antonio Del Pin, expresidente de la Liga Salteña de Béisbol, quien falleció recientemente. Su esposa, Mara Narancic, además de sus hijos y nietos, dijo presente.
Luego, el clásico salteño se puso en marcha y terminó con la gran victoria espinaca por 7 a 0 ante los tricolores.
Sin dudas, uno de los jugadores más destacados fue Lucas Ramón arriba del montículo, ya que lanzo seis innings y no permitió ningún hit. Además ponchó a cinco rivales. Luego fue reemplazado por Elián Sánchez, quien completó el partido sin dejar que Cachorros anote una carrera.
Por el lado de la ofensiva espinaca, Francisco Postigo y Federico Gómez fueron fundamentales, además de Lucas Montalbetti y Rodolfo Arnedo.
Con el resultado consumado, Cachorros quedó eliminado de la competencia, tras disputar en un nivel que fue de mayor a menor, mientras que por Popeye Bordó fue todo lo contrario, ya que durante los primeros días del torneo no encontró el rumbo y recién se despertó poco antes de los cruces.
Hoy, a las 13, Popeye Bordó se medirá ante Daom de Buenos Aires en la gran final.
Los del Bajo Flores finalizaron primeros en la fase regular y por ese motivo accedieron directamente al encuentro decisivo sin jugar las semis. El choque irá televisado.