Es increíble que la escuela Rural N§ 4.330 Eustaquio Alderete del paraje La Merced Chica tenga escasa matricula comparada con otras establecimientos educativos del nivel primario. Está tan cerca de Salta capital como tan lejos de la ciudad de Rosario de Lerma a donde pertenece este pequeño poblado enclavado a la vera de la ruta nacional 51. La escuela tiene 109 años de funcionamiento. Está tan aislada como la población que la rodea.
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Es increíble que la escuela Rural N§ 4.330 Eustaquio Alderete del paraje La Merced Chica tenga escasa matricula comparada con otras establecimientos educativos del nivel primario. Está tan cerca de Salta capital como tan lejos de la ciudad de Rosario de Lerma a donde pertenece este pequeño poblado enclavado a la vera de la ruta nacional 51. La escuela tiene 109 años de funcionamiento. Está tan aislada como la población que la rodea.
Para llegar se debe transitar por la ruta pasando por San Luis, surge un inesperado cartel señalizador, entre medio de otros que promocionan el turismo de estancia en la zona. Llegar a la Eustaquio Alderete no es difícil. Se debe caminar un kilómetro por la polvorienta ruta provincial 94 hasta llegar a la escuelita.
No hay banquinas ni veredas. Una extensión de yuyarales invade el único camino peatonal de los vecinos. Ahí está el ingreso de la escuelita rural. A pesar de la falta de atención a los vecinos de la zona, el establecimiento es amplio, bien cuidado y con un enorme techado que cubre el patio delantero.
Su plantel de docentes es completo. Por la mañana funcionan las aulas desde el 4º al 7º; y por las tarde el nivel inicial de 5 y 4 años, y del 1º al 3º. Es de jornada simple con comedor escolar, se imparte el almuerzo y al merienda. Tan completa es la escuelita que tiene las secciones independientes, y acondicionadas con mobiliarios adecuados. Cuenta con talleres interactivo en contraturno y hasta una biblioteca multiuso.
Entonces, ¿por qué tiene vacantes aún la escuelita? La razón tiene varias explicaciones derivadas de la realidad de la zona "Muchas familias se han marchado de este paraje por falta de trabajo. Otra razón es la falta de un colectivo que pase cerca de la escuela. El único que pasa cerca, tiene su parador en la ruta nacional 51. Después los chicos deben caminar o por el barro, o en medio de los yuyarales. Caso contrario la velocidad de los vehículos por la ruta de tierra provoca el rechazo de venir a la escuela", contó Raquel Nieva, directora de la Eustaquio Alderete.
Las inscripciones siguen abiertas en esta escuelita a esta altura del año en todos los niveles. Paradójicamente a pocos kilómetros por esta misma ruta nacional, en San Luis, y La Silleta, las escuelas del nivel primario tienen exceso de matrícula. Y muchos de esos niños habitan la zona de La Merced Chica.
"El año pasado ocurrió lo mismo. El colectivo los deja a los alumnos a metros de las otras escuelas. Nosotros tenemos varios obstáculos para llegar. Incluida la seguridad por el camino que pasa frente a nuestro establecimiento", reclama la directora.
La oferta educativa en las aulas es buena, pero poco conocida por los habitantes de esta zona, tan cercana a la capital provincial, asistida por el municipio de Campo Quijano cuando puede, pero perteneciente a la comuna de Rosario de Lerma.
"El municipio de Rosario nos ayudó con la mano de obra cuando levantamos el techo del patio. También corta el pasto frente a nuestra escuela. Creo que la cuestión jurisdiccional influye para que estemos aislados y olvidados como comunidad educativa".
Para rematar la directora insiste con las vacantes disponibles en su escuela. "Tenemos 110 chicos en las aulas, el año pasado tuvimos alrededor de 135. Todavía recibimos a los escolares interesados en venir a la Eustaquio Alderete".
Vecinos, aislados
La población rural de esta zona ha crecido en este último tiempo. De apenas mil superan los 5 mil en la actualidad. A tan solo minutos de Salta capital, su dependencia política administrativa corresponde a Rosario de Lerma, a unos 20 kilómetros de distancia.
A fines de la década del 70 se forjó a Rosario de Lerma para que esta jurisdicción tuviera la cantidad de habitantes necesarias que la ayude a ser nombrada ciudad. Así ocurrió. Los funcionarios de aquel entonces echaron mano de esta pequeña población para lograr su objetivo. Desde entonces esta comunidad lucha para ser tenida en cuenta. Ya sea por Campo Quijano, Rosario de Lerma o Salta capital.