La intensa lluvia que castiga a Salta desde ayer por la noche, obligó a que el acto al cumplirse 37 años de la guerra por Malvinas se traslade dentro del Ejército. La ceremonia se realizó en uno de los galpones que existen en esa base logística y estuvieron presentes el gobernador, Juan Manuel Urtubey junto a otras autoridades.
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La intensa lluvia que castiga a Salta desde ayer por la noche, obligó a que el acto al cumplirse 37 años de la guerra por Malvinas se traslade dentro del Ejército. La ceremonia se realizó en uno de los galpones que existen en esa base logística y estuvieron presentes el gobernador, Juan Manuel Urtubey junto a otras autoridades.
La información, sobre el traslado del acto, fue brindada a media mañana por lo que mucha gente debió caminar hacia avenida Bolivia para poder ingresar al Ejército y presenciar el desfile. Con público y familiares de caídos presentes, el espacio fue reducido pero las ganas y el sentimiento estuvieron más presentes que nunca.
"Cuando mi hijo se fue tenía 18 años y me enviaba cartas una de las últimas en una de las últimas nos decía que no tengamos miedo y que recemos porque ellos querían recuperar las islas”, dijo la madre de Hilario Ramos uno de los tantos jóvenes que perdieron la vida en el buque ARA General Belgrano. En diálogo con El Tribuno expresó que sintió mucho placer al poder viajar a las islas.
“Pudimos ir en dos oportunidades en la isla de los estados para rendirle un homenaje. El crucero General Belgrano debe ser un cementerio bajo el mar y jamás puede ser removido”, dijo la madre de Hilario. No lo vamos a volver a ver pero están en el recuerdo siempre y con ese podemos salir adelante”.