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¿Qué pasará si Juventud va a concurso de acreedores?

Esto puede significar una salida a una deuda millonaria, pero también un riesgo de quiebra a futuro.
Viernes, 03 de mayo de 2019 02:45

El presidente de Juventud Antoniana, Gustavo Klix, instaló este candente tema en diálogo con El Tribuno: no se descarta llamar a un concurso de acreedores en el santo, ante la pesada herencia de deuda que recibió la actual comisión directiva. En un momento crítico, sin ingresos, sin competencia, en la entidad de la Lerma se sabe que la deuda es millonaria por la suma de embargos, juicios, más una onerosa carga de la AFIP de los últimos 12 años. 

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El presidente de Juventud Antoniana, Gustavo Klix, instaló este candente tema en diálogo con El Tribuno: no se descarta llamar a un concurso de acreedores en el santo, ante la pesada herencia de deuda que recibió la actual comisión directiva. En un momento crítico, sin ingresos, sin competencia, en la entidad de la Lerma se sabe que la deuda es millonaria por la suma de embargos, juicios, más una onerosa carga de la AFIP de los últimos 12 años. 

Pero, ¿qué es un concurso de acreedores? En realidad no es tan extremo y apocalíptico como muchos pueden considerar y tampoco es una quiebra o una intervención judicial como aquella a la que se acogió Gimnasia y Tiro en 2002 a través de la ley de fideicomiso. El llamado a convocatoria de acreedores puede ser una vía de solución para la deuda del santo, pero que también expone al club al peligro de quiebra y remate, a futuro, en caso de no cumplir los pagos.

“Es una figura preventiva que busca preservar a un club que tiene una deuda onerosa, un manto de cobertura a la crisis financiera, un paraguas jurídico. En esta instancia se establece un plan de pagos con cada acreedor. Llegada esta instancia, si a alguno de ellos no se le cumple, un acreedor puede pedir la quiebra. Concursar es un riesgo, pero más riesgoso es quedarse fuera de un paraguas jurídico para evitar un futuro remate”, explicó el contador Federico Mateo.
 

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