San Lorenzo fue eliminado este domingo de la Copa Superliga por Argentinos Juniors tras empatar 1-1, como local, luego de la derrota por 1-0 en la ida de los octavos de final en La Paternal, y el ciclo del entrenador Jorge Almirón pierde cada vez más crédito.
El defensor Marcelo Andrés Herrera abrió el marcador a los 21 minutos del primer tiempo y estiraba la definición a los tiros desde el punto penal, pero Nicolás Reniero, en contra, a los 36, le dio la clasificación al bicho por la ventaja que obtuvo con el triunfo por 1-0 en la ida.
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San Lorenzo fue eliminado este domingo de la Copa Superliga por Argentinos Juniors tras empatar 1-1, como local, luego de la derrota por 1-0 en la ida de los octavos de final en La Paternal, y el ciclo del entrenador Jorge Almirón pierde cada vez más crédito.
El defensor Marcelo Andrés Herrera abrió el marcador a los 21 minutos del primer tiempo y estiraba la definición a los tiros desde el punto penal, pero Nicolás Reniero, en contra, a los 36, le dio la clasificación al bicho por la ventaja que obtuvo con el triunfo por 1-0 en la ida.
Luego de dejar en el camino a Independiente en la primera fase, el equipo dirigido por Diego Dabove se cargó al ciclón y espera por el ganador de Gimnasia y Esgrima La Plata- Defensa y Justicia para conocer su rival en los cuartos de final.
En un partido que tuvo de todo: demora de una hora por problemas en la indumentaria, mucha pierna fuerte y una gran intensidad, San Lorenzo se despidió silbado de la Copa de la Superliga y el entrenador Jorge Almirón pierde cada vez más crédito y su continuidad parece depender de lo que suceda en la Copa Libertadores de América.
El cuervo ya se aseguró la clasificación a los octavos de final de ese certamen y el próximo miércoles viajará a San Pablo para definir si pasa como primero o segundo del grupo F cuando visite al líder Palmeiras, que le lleva dos puntos.
El bicho también tiene por delante un compromiso internacional, ya que este lunes a primera hora volverá a viajar a Venezuela para intentar cerrar la serie ante Estudiantes, de Mérida, luego de la suspensión de la semana pasada.
Este viaje fue el responsable indirecto de la demora de una hora del inicio del encuentro ya que Argentinos Juniors embaló toda la indumentaria blanca para viajar a Venezuela y llegó al estadio Nuevo Gasómetro con la alternativa negra que no estaba dentro de lo estipulado con las autoridades de la Superliga.
La insólita situación se resolvió con los pantalones rojos de la reserva que estaban en el predio del club ubicado en el Bajo Flores, a pocas cuadras del estadio de San Lorenzo, y unas medias blancas, ya que San Lorenzo no tenía a disposición los shorts blancos que utilizó hace dos meses en el duelo por Superliga.
En el plano futbolístico, Argentinos Juniors fue superior en los dos partidos de la llave y fue merecedor de la clasificación ante un rival que no encuentra respuestas ni goles.
La remontada se planteaba difícil desde el arranque, ya que en el ciclo de Almirón el conjunto de Boedo sólo había marcado dos goles en tres partidos, pero apenas en uno había servido para ganar (2-0 ante Melgar por Copa Libertadores) y además sumaba cuatro encuentros sin convertir.