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28 de Marzo,  Salta, Centro, Argentina
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Procesaron a una organización de estafadores fiscales

Los imputados habrían conformado una asociación dedicada a la comercialización de facturas apócrifas. Trabaron embargo a Héctor Luis Palópoli, Alfredo Eduardo Camacho, Arnaldo Nelson Roldán y Cristian Marcelo Jardín.
Lunes, 10 de junio de 2019 08:59

El Juzgado Federal Nº 1 de Salta, a cargo de Julio Leonardo Bavio, dictó el procesamiento de cuatro personas (una de ellas contador público nacional), luego de considerarlas miembros de una asociación ilícita fiscal dedicada a la comercialización de facturas apócrifas. En el mismo fallo, el magistrado les trabó embargo por 2.500.000 pesos a cada uno.
En la resolución se consigna que de las tareas de investigación realizadas por la AFIP, en forma conjunta con la Policía de Seguridad Aeroportuaria, se pudo determinar que el contador Héctor Luis Palópoli junto a Alfredo Eduardo Camacho, Arnaldo Nelson Roldán y Cristian Marcelo Jardín conformarían una presunta asociación ilícita con la participación de las personas que oficiaron como “usinas”, con el objeto de cometer ilícitos tributarios.
Según el juez Bavio, la maniobra fraudulenta consistió en la emisión de facturas apócrifas y usinas a través de las cuales habrían facturado un total aproximado de 342.500.000 pesos y un IVA de $ 58.400.000. En ese sentido, se destacó que la maniobra que habrían efectuado los nombrados consistía en la captación y utilización de personas de existencia real (de nula capacidad operativa, financiera y económica) para “generar y comercializar facturas apócrifas”, en los períodos comprendidos entre los años 2017 y 2018.
En el marco de la investigación se determinó que el contador Palópoli, con la complicidad de Camacho, Roldán y Jardín, vendía los comprobantes apócrifos a diversos contribuyentes en actividad, quienes mediante su contabilización y declaración disminuían la base imponible, tanto del impuesto al valor agregado (IVA). Mediante este ardid, los citados contribuyentes lograban incrementar el crédito fiscal computable, como del impuesto a las ganancias, acrecentando con ello el gasto deducible, con el fin de evadir dichos impuestos.

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El Juzgado Federal Nº 1 de Salta, a cargo de Julio Leonardo Bavio, dictó el procesamiento de cuatro personas (una de ellas contador público nacional), luego de considerarlas miembros de una asociación ilícita fiscal dedicada a la comercialización de facturas apócrifas. En el mismo fallo, el magistrado les trabó embargo por 2.500.000 pesos a cada uno.
En la resolución se consigna que de las tareas de investigación realizadas por la AFIP, en forma conjunta con la Policía de Seguridad Aeroportuaria, se pudo determinar que el contador Héctor Luis Palópoli junto a Alfredo Eduardo Camacho, Arnaldo Nelson Roldán y Cristian Marcelo Jardín conformarían una presunta asociación ilícita con la participación de las personas que oficiaron como “usinas”, con el objeto de cometer ilícitos tributarios.
Según el juez Bavio, la maniobra fraudulenta consistió en la emisión de facturas apócrifas y usinas a través de las cuales habrían facturado un total aproximado de 342.500.000 pesos y un IVA de $ 58.400.000. En ese sentido, se destacó que la maniobra que habrían efectuado los nombrados consistía en la captación y utilización de personas de existencia real (de nula capacidad operativa, financiera y económica) para “generar y comercializar facturas apócrifas”, en los períodos comprendidos entre los años 2017 y 2018.
En el marco de la investigación se determinó que el contador Palópoli, con la complicidad de Camacho, Roldán y Jardín, vendía los comprobantes apócrifos a diversos contribuyentes en actividad, quienes mediante su contabilización y declaración disminuían la base imponible, tanto del impuesto al valor agregado (IVA). Mediante este ardid, los citados contribuyentes lograban incrementar el crédito fiscal computable, como del impuesto a las ganancias, acrecentando con ello el gasto deducible, con el fin de evadir dichos impuestos.

La investigación

La investigación contra esta banda de estafadores fiscales se inició en junio del año pasado con la intervención del fiscal federal Ricardo Toranzos. Así fue como en el marco de un megaoperativo, personal de Policía de Seguridad Aeroportuaria allanó en simultáneo los domicilios imputados en el casco céntrico y en barrios residenciales de esta capital.
En una de las propiedades secuestraron material importatísimo para la causa, detuvieron al contador Palópoli, quien vivía en una mansión del barrio Tres Cerritos, sobre la calle Los Parrales. Lo propio ocurrió en una vivienda de la calle Tucumán al 700, donde residía Arnaldo Nelson Roldán, considerado uno de los principales operadores de la organización. Los agentes de la PSA también irrumpieron con la orden judicial en un inmueble del pasaje Del Temple al 400, y en otros del macrocentro salteño, donde funcionaban los estudios contables y donde se realizaban las operaciones fraudulentas. Con las pruebas recolectadas, se pudieron identificar a las empresas que compraban las facturas apócrifas.
 

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