Aprender a vivir. Los vaivenes de la economía del país a lo largo de varias décadas llevaron a los argentinos a buscar y generar medios de ingresos que les permita algo tan sencillo como comer y vestirse. En algunos casos con más inversión que otros, pero en definitiva la idea es vivir los más dignamente posible.
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Aprender a vivir. Los vaivenes de la economía del país a lo largo de varias décadas llevaron a los argentinos a buscar y generar medios de ingresos que les permita algo tan sencillo como comer y vestirse. En algunos casos con más inversión que otros, pero en definitiva la idea es vivir los más dignamente posible.
Cuando hace 7 años atrás las ferias americanas que se ubicaban sobre la ruta 26, conocida como Camino a La Isla, fueron reubicadas, aquellos que nos se dedicaban a la venta de ropa importada bajo los toldos azules, tuvieron que buscar nuevos horizontes. En aquella zona, y lentamente comenzó a organizarse una feria en la plaza de barrio Solidaridad. Con mantas en el piso, las mujeres que vendían ropa y calzado de niños fueron las primeras en aparecer. Luego se sumó la producción de alimentos, la venta de verduras, hasta que en la actualidad, las panaderías de zona ofrecen tortillas, tiras y pan dulce en oferta.
La feria de Solidaridad se presenta los lunes y viernes, desde las 14 y hasta la noche. En las primeras épocas solo era hasta el atardecer, pero ahora los grupos electrógenos permiten tener un predio iluminado entre las avenida 200, y desde la calle Fortín Campo de los Cerrillos hasta la calle Fortín Celodini. Sobre el extenso predio se comercializan muebles, artículos de limpieza, artículos de bazar, ropa y calzado nuevo, herramientas, cerámicas y alimentos como brochettes, gelatinas y jugos.
Desde principio de 2019, una nueva feria se ubicó en la zona sudeste, en el barrio La Paz. En este caso, el punto de encuentro es la plazoleta. Allí, los vecinos de la zona mudan los mismos productos que se ofrecen en Solidaridad los lunes y viernes. En este caso, la feria busca también captar a quienes se toman el domingo para pasear en el parque de La Familia, donde se venden productos artesanales, en su mayoría.
En la zona norte, desde hace cinco años, Vaqueros cuenta con un feria que comenzó con aspiraciones de ser un punto de encuentro para los vegetarianos y quienes buscaban alimentos orgánicos, y además un breve espacio de recreación para los chicos con muestras culturales. De la mano de este emprendimiento que se ubica en el espacio conocido como la Canchita de López, frente a la sede municipal sobre la ruta nacional 9, surgió la feria de los precios cuidados. Mientras en la canchita se ubicaron artesanos, en el playón municipal se instalaron los vendedores de verduras, representantes de dos empresas lácteas de la provincia, productores de carne de cerdo, vendedores de artículos para el hogar y sobre las veredas de ambas ferias, los vendedores de ropa usada y alimentos.
Así que todos los sábados de 11 a 15, la ruta nacional 9 sobre Vaqueros recuerda las viejas épocas de los 80, donde la carne más barata se compraba de los matarifes de esta zona, con las filas de autos y familias cargadas con bolsas del mercado.
También en la zona norte, pero los domingos, los vecinos que no pudieron acercarse el sábado a Vaqueros, pueden buscar lo que necesiten el domingo en la feria del Quirquincho, que se ubica en el ingreso a Ciudad del Milagro, donde se instaló hace algunos años la figura del animal autóctono.
San Lorenzo no escapa a la modalidad de las ferias, ya que los sábados, la plaza de la villa veraniega se puebla de vendedores, en su mayoría de alimentos. Allí las especialidades que más salen son las empanadas, bollos y dulces.
En esta zona, a fines del año pasado también se buscó promover ferias de carritos de comidas o "food trucks", así fue que se organizó una muestra con todas las propuestas de carros móviles que hoy recorren la ciudad buscando los mejores clientes u ofrecen sus atenciones para eventos. En aquel momento, la feria se organizó en una predio de la Circunvalación Oeste. El pasado 8 y 9 de junio, San Lorenzo también dio espacio la feria de decoración que se realizó por tercera vez convocando a 80 emprendedores, que contó con casi 1.500 visitantes.
En la zona oeste de la ciudad, en barrio Palermo, sobre la plaza y las calles adyacentes se ubica la feria de frutas y verduras de los domingos que desde hace cinco años ofrece también alimentos, ropa y artículos de limpieza.
Allí, las familias de la zona que circunda Grand Bourg se abastecen de cajas de leche, pañales, jabón para la lavar ropa y fideos, ordenando las necesidades de todos los días.
En la zona sur, la ferias barriales comenzaron a organizarse en función de los días en que se hacen efectivos los sueldos. Solo se presentan los dos primeros domingos de cada mes. Tal es el caso de las ferias de Juan Pablo II en la cancha Karol Wojtyla. Allí los feriantes se ordenaron según los productos que comercializan. En un sector los alimentos y en otro la ropa y calzado. En este caso también crearon un grupo de WhatsApp donde organizan la venta de los productos entre amigos y familiares.
En ampliación Santa Ana II también se instaló un feria, que solo se presenta los sábados desde las 11 hasta las 17. Como en las demás, la venta de alimentos y ropa es lo que predomina y copa el mercado, donde las madres van y vienen buscando talles de ropa de invierno para sus chicos.
En barrio Miguel Aráoz, la feria del trueque se hace el centro vecinal, los dos primeros domingos de cada mes. Allí, algunas familias se acercan con electrodomésticos con poco uso como batidoras y licuadoras o exprimidores para canjear por alimentos. El primer puesto lo ocupa la leche en polvo o maternizada. Le siguen fideos, arroz y azúcar.
Encuentro de emprendedores
Con el objetivo de organizar las ferias barriales, buscando regularizar la situación se los emprendedores, además de capacitarlos, desde la Dirección de Economía Social de la Municipalidad se lleva adelantes hace cuatro año un programa de ferias barriales.
En la actualidad las feriantes de los barrios de la ciudad de Salta tienen la posibilidad de llevar sus productos los domingos al sector de anfiteatro del parque San Martín, donde desde las 11 y hasta las 19 ofrecen sus productos, que van desde alimentos hasta la fabricación de uniformes. En este lugar se ofrecen productos a precios regulados y se informa sobre la metodología para poder sumarse. Desde julio, algunos de los miembros de esta feria tendrán la posibilidad de ser parte de las ferias itinerantes que recorrerán las plazas Colón, Gemes y Belgrano.