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El taxista salvajemente golpeado el pasado lunes por un automovilista particular en el partido bonaerense de Ensenada murió hoy, mientras que su agresor permanecía en libertad a la espera de que la Justicia resuelva el contrapunto entre la Fiscalía y la defensa.
El violento hecho se produjo el pasado lunes a las 60 en el cruce de las calles 136 y 50, en la zona del dique del Canal Santiago, en el sur del Conurbano bonaerense.
La víctima, Jorge Alberto Gómez, de 52 años, mantuvo una discusión de tránsito con el conductor de una camioneta, identificado como Esteban Oscar González Zablocki, de 27 años: el joven frenó su vehículo y fue directo a golpear al taxista.
El agresor derribó a Gómez y continuó golpeándolo furiosamente en el piso.
El taxista presentaba "un trauma cerrado de encéfalo", con "muerte cerebral", a causa de los golpes: en horas de la tarde de este viernes, falleció tras cinco días de agonía en el Hospital Cuenca Alta, de Cañuelas.
Pese a que la Fiscalía había solicitado la detención, que fue avalada por el juez Juan Pablo Masi, González Zablocki permanecía en libertad, debido a que sus abogados presentaron un pedido de eximición de prisión.
"Aún con homicidio simple corresponde que quede detenido, pero el Código Procesal Penal impone la suspensión de la ejecutoriedad de las medidas cautelares, por ejemplo la detención, hasta tanto queden firme. Al haber presentado la defensa un pedido de eximición de prisión, la persona no puede ser detenida hasta que el tribunal de alzada revise eso. No se puede ejecutar la detención, que ya está ordenada", explicó el magistrado..
E insistió: "Yo había ordenado la detención por homicidio en grado de tentativa (antes de la muerte de Gómez). Por parte de la defensa se hizo un pedido de eximición de prisión. Según marca el Código de la Provincia, hasta tanto no se encuentre resuelta esa cuestión, no se puede concretar la detención. La detención está ordenada, con suspenso hasta que se resuelva esto".
Ante la situación, que generaba malestar en los familiares del taxista, Masi recordó que "en infinidad de veces" se planteó la necesidad de reformar la legislación vigente para evitar este tipo de conflictos.
"Si yo, como persona, digo lo que opino, seguro va a ser muy diferente de la aplicación de la ley que me veo forzado a hacer", reconoció el magistrado.
Asimismo, señaló que ahora "depende del fiscal" cómo continuará la causa: "Si pretende imputar el hecho por homicidio, tendrá que indagar nuevamente al imputado y ahí se verá.
En tanto, el abogado del agresor, Gabriel Mendy, indicó que "el proceso sigue con el agotamiento de las vías recursivas, a la espera de la resolución de la Cámara de Garantías a ver si confirma o no la resolución del juez de Garantías número 5".
"Su estado emocional no le permitía entablar un diálogo más o menos serio, por lo que le aconsejamos no prestar declaración.
Como ya estaba dispuesta la libertad, preferimos dejar la conversación para dentro de 48 horas y poder tratar de entender qué es lo que sucedió, más allá de las imágenes que son violentas y desagradables. Las imágenes son elocuentes. Aprovecho la oportunidad para enviar mis condolencias a los familiares", añadió el letrado.
Y concluyó: "La discusión va a estar dada, no en cuanto a la autoría, sino a la responsabilidad penal, cuál es el hecho que se le debe imputar. En este inicio de la investigación, partimos de la base de que González no se baja de la camioneta con intenciones homicidas".