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Mirá el espectacular vestido de novia estilo boho de Charlotte Casiraghi

El 29 de junio, Charlotte Casiraghi y Dimitri Rassam volvieron a casarse con ceremonia religiosa casi un mes después de su enlace civil. Ella llevó un vestido diseñado por su amigo Giambattista Valli. De cuento de hadas.
Martes, 02 de julio de 2019 18:49

Con puntillas, tules, transparencias, bordados y volados, Charlotte Casiraghi parecía una princesa de cuento de hadas. Después de la boda por civil, el pasado 1 de junio en el palacio de los Grimaldi, en Mónaco, ella y su flamante esposo, Dimitri Rassan, se casaron con ceremonia religiosa el pasado sábado en la abadía Sainte-Marie de Pierredon, en Saint-Rémy-de-Provence.

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Con puntillas, tules, transparencias, bordados y volados, Charlotte Casiraghi parecía una princesa de cuento de hadas. Después de la boda por civil, el pasado 1 de junio en el palacio de los Grimaldi, en Mónaco, ella y su flamante esposo, Dimitri Rassan, se casaron con ceremonia religiosa el pasado sábado en la abadía Sainte-Marie de Pierredon, en Saint-Rémy-de-Provence.

El vestido de estilo vintage y con aires boho chic, fue diseñado especialmente por su amigo Giambattista Valli. Y si el que usó para el civil fue un homenaje a su abuela, Grace Kelly, en esta oportunidad le rindió tributo a su mamá, Carolina de Mónaco. Es que el diseño era muy similar al de Christian Dior que usó para la boda con su primer marido, Philippe Junot en 1978. Y otro dato no menor: casualmente, Carolina y Philippe también se casaron un 29 de junio como Charlotte y Dimitri. 

Similitudes entre los vestidos de novia de madre e hija.

El mismo detalle en el escote, mangas transparentes y detalles florales bordados, hacen que el vestido que llevó Charlotte sea muy parecido al de Carolina.

El vestido de Charlotte tenía un falso escote Bardot y las mangas semitransparentes y con volumen se complementaban con una cintura entallada y una falda de volados con bordados. Como joyas, la novia escogió unos sencillos aros de diamantes con colgante a juego.

Más allá del velo, que cubría toda la espalda de la novia, la gran sorpresa ha estado en el ramo de lavanda, planta típica de la Provenza francesa.

Desde su cuenta de Instagram, Giambattista Valli felicitó a la novia.

Y si bien las dos remataron sus tocados con tul, Carolina llevó un peinado que adornó con dos apliques laterales de pequeñas flores blancas, mientras que Charlotte lleva un recogido con clásico velo corto y un pasador brillante a modo de tiara. Este peinado fue un tributo a las mujeres de Arlès.

Hubo sólo dos fotos oficiales del evento: a la salida de la iglesia, Charlotte y Dimitri tomados del brazo y la otra, besándose mientras los invitados les tiran los tradicionales granos de arroz.

El ramo llevaba lavanda, un guiño a La Provence. Ésta es la segunda foto oficial que circuló de la boda.

Sin duda alguna, Charlotte quiso rendirle homenaje a su madre, Carolina de Mónaco, casándose por iglesia en la misma fecha que ella lo había hecho con su primer marido; haciéndolo en Saint-Rémy-de-Provence, el lugar de residencia de la familia tras la muerte de Stéfano Casiraghi;  y con este vestido de inspiración bohemia muy parecido al que llevó su madre.

Giambattista Valli compartió una imagen de los novios en su perfil de Instagram acompañada por este mensaje: “Felicidades a Carlota Casiraghi y Dimitri Rassam por su boda en Saint-Remy-de-Provence. La novia llevaba un vestido personalizado de alta costura de Giambattista Valli. ¡Muy felices de formar parte de este sueño! Foto: @felixdolmaillot”.

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