En la crisis inflacionaria que azota al país desde hace más de una década hay hijos y entenados. Entre los que no se vieron afectados por el flagelo económico parece estar la empresa a cargo del servicio de recolección de residuos de la capital salteña, Agrotécnica Fuegina, que no tuvo ningún impacto por la incesante suba de precios. Más bien todo lo contrario.
inicia sesión o regístrate.
En la crisis inflacionaria que azota al país desde hace más de una década hay hijos y entenados. Entre los que no se vieron afectados por el flagelo económico parece estar la empresa a cargo del servicio de recolección de residuos de la capital salteña, Agrotécnica Fuegina, que no tuvo ningún impacto por la incesante suba de precios. Más bien todo lo contrario.
El Ejecutivo municipal acaba de aprobar una redeterminación del precio que se le paga a la contratista, llevándolo a $70.548.785 por mes. En la última licitación en que participó la firma para el mantenimiento de la higiene urbana de la ciudad, hace 10 años, se había establecido un monto mensual de casi $8 millones por esa prestación desde noviembre de 2009. A partir de aquella época hasta la actualidad la inflación rondó el 300% (medido por el IPC Congreso, consultoras privadas y el Indec desde hace tres años), pero los ingresos de Agrotécnica subieron un 789% en el mismo período.
Desde la renovación por cuatro años del contrato con la empresa en octubre de 2016, cuando se estableció un pago de cerca de $33 millones por mes, hasta la actualidad el costo de la prestación se actualizó en un 112%, porcentaje que, esta vez sí, fue a la par de los índices inflacionarios.
En la reciente redeterminación de precios, oficializada con el boletín municipal del viernes pasado, se sumaron $8.921.723 por mes al contrato de Agrotécnica. Ahora se paga más de $2.300.000 por día para la recolección de residuos y mantenimiento de espacios verdes.
La contratista está habilitada a solicitar una redeterminación de su cuota cada vez que el índice de precios del Indec acumule una suba del 10%, más otras circunstancias que conforman una fórmula polinómica de actualización. A ese recurso ya se recurrió en enero de este año y no se descarta que se vuelva a utilizar en los próximos meses.
La cuestionada gestión del vertedero San Javier también está a cargo de la misma compañía, que fue denunciada junto a la Municipalidad y la Provincia a través de un amparo presentado en agosto de 2017. La acción judicial fue impulsada por vecinos de la zona sudeste, quienes sostienen que no se está conteniendo la contaminación ambiental que produce el basurero.
En la causa, que lleva adelante el juez de la Sala III de la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial, Marcelo Domínguez, lo último que se conoció es que desde una de las partes acusadas, la Secretaría de Ambiente de la Provincia "recomendaron" clausurar la trinchera 1 del vertedero, donde se deposita hoy la basura urbana a pesar de que se la había cerrado en 1999. Se la volvió ocupar por encima de su capacidad.
Las trincheras 2 y 3 están completas y la cuarta aún no se habilitó, porque le falta una membrana geotextil que impida la posible filtración de los líquidos lixiviados (producto de la compactación de los residuos) hacia las napas y el río Arenales. La Municipalidad asumió la responsabilidad de comprar ese elemento y, según aseguró a El Tribuno el secretario de Ambiente de la comuna, Gastón Galíndez, antes de fin de año la geomenbrana ya estará instalada y el deposito 4 en marcha.