A la comuna de Rosario de Lerma, al igual que a los municipios del resto del Valle de Lerma, apenas le alcanzan los fondos para mantener los servicios y el pago mensual a los empleados. Los comerciantes, pilar del movimiento económico en los pueblos, están muy preocupados por la situación después de las PASO.
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A la comuna de Rosario de Lerma, al igual que a los municipios del resto del Valle de Lerma, apenas le alcanzan los fondos para mantener los servicios y el pago mensual a los empleados. Los comerciantes, pilar del movimiento económico en los pueblos, están muy preocupados por la situación después de las PASO.
Las arcas municipales enflaquecerán aún más en este semestre a tal punto que la obra pública y los servicios a la población se pueden ver afectados en comunas en donde la coparticipación provincial y la federal apenas alcanzan.
Días pasados la moratoria impulsada por el municipio de Rosario de Lerma tuvo buenos resultados en la recaudación impositiva, pero desde el lunes, luego de las elecciones primarias abiertas, simultáneas y obligatorias a nivel nacional, las ventanillas de las oficinas de rentas no recibieron a ningún contribuyente. Esto obligó a dar de baja a la moratoria ante la falta de recaudación impositiva en esta ciudad.
“La moratoria fue lanzada para captar al contribuyente que quiere pagar sus tributos, pero no le alcanza. Por ello tiene este sistema de recaudación con descuentos importantes. Increíblemente desde este lunes no viene nadie. Sin lugar a dudas el efecto dólar incidió en la población de una manera u otra”, explicó a El Tribuno Ricardo Svitek, secretario de Hacienda Municipal.
El funcionario contó lo difícil que es afrontar el pago a los proveedores, además de no poder proyectar ningún trabajo a largo plazo por los costos de la inflación. “Somos una comuna con alrededor de 40 mil habitantes y la coparticipación es muy baja. Una de las cinco últimas en la lista provincial de municipios. Rosario de Lerma recibe igual dinero que un municipio de 8 mil habitantes. No es justo. Sin embargo la ciudad debe seguir funcionando. Todos los días es una odisea poder pagar a proveedores y asistir a la población”.
Svitek, con amplia experiencia en el manejo de los recursos comunales, consideró que el efecto pos PASO se siente en el interior al igual que en las grandes urbes del país.
“Nosotros compramos materiales de construcción a un precio, y como nos dan crédito, al pagar debemos hacerlo con los aumentos. Tuvimos que retacear en varias áreas los gastos. Estaba complicado. Este semestre estimó que será peor”
El funcionario aclaró que la administración municipal de Ignacio Jarsún está equilibrada con respecto a las finanzas “no debemos nada a nadie. Pero el día a día se complica más. Quizás otras administraciones no explican esto a la gente, pero nosotros damos la cara. Estamos mal. Y hacemos malabares para salir adelante”
Las afirmaciones de Svitek son un reflejo palpable en los comercios rosarinos. Algunos cerrados, y otros que dan batalla como pueden. Algunos corralones de materiales de obra advierten que no hay mercadería disponible, y que deberán licenciar a su personal.
Otros emprendimientos de servicio, están al borde del cierre por tiempo indeterminado. “Tengo que pagar impuestos, permisos, y nadie entra a mi comercio. No hay dinero, con esta suba del dólar, todos cuidan lo poco que tienen” narró su situación Mónica de un conocido local gastronómico de esta ciudad.
Los taxistas es otro sector que la está pasando mal. Los viajes diarios no son los habituales, y los choferes salvan el “puchero”, con algún fin de semana movido en al ciudad.
“Antes tenía varios viajes al día, es increíble cómo mermo el traslado de pasajeros en estas semanas. Los fines de semana repunta un poco. Pero alcanza para pucherear y nada más” contó Sabino un chofer con años de calle en esta ciudad.
Rosario de Lerma es una comuna de las grandes. El resto del Valle de Lerma siente el impacto. Las recaudaciones impositivas son bajas, y la coparticipación alcanza sólo para pagar a los trabajadores.
En la zona están asentadas cinco empresas multinacionales con instalaciones de mediana envergadura. En El Carril, la acopiadora de tabaco de Alliance One, en Rosario de Lerma Massalín y la curtiembre ARLEI, en Campo Quijano, las mineras de Santa Rita y Borax Argentina. Cabe aclarar que esta mineras tienen su instalaciones sólo de trabajos menores, su potencial industrial lo desarrollan en la zona de la puna salteña.
El resto de la población se desempeña en la administración pública provincial, en la producción agrícola en menor escala, y pequeños emprendimientos de servicio.