El recrudecimiento de las crisis económica tras las PASO presidenciales supone una caída aún más profunda para la construcción salteña, que viene con indicadores negativos desde mediados del año pasado y todavía no tocaron piso, como parecía que ocurría en mayo pasado, cuando los índices habían comenzado a estabilizarse.
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El recrudecimiento de las crisis económica tras las PASO presidenciales supone una caída aún más profunda para la construcción salteña, que viene con indicadores negativos desde mediados del año pasado y todavía no tocaron piso, como parecía que ocurría en mayo pasado, cuando los índices habían comenzado a estabilizarse.
Datos empresariales y del sindicato que agrupa a los trabajadores de la construcción dan cuenta sobre el crítico panorama que atraviesa la actividad.
El último informe de Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric) consigna que en Salta el empleo formal del sector cayó un 3% en junio pasado en relación con igual período de 2018. Quedaron con trabajo hace dos meses 7.332 trabajadores en blanco en la provincia.
Durante todo el primer semestre la caída interanual de los puestos registrados locales fue del 6,8%, muy superior a la media nacional que llegó al 1,8%. Por cierto, en los primeros seis meses del año la provincia fue la que mejor sobrellevó la crisis en el NOA. El resto de los distritos de la región tuvieron pérdidas de empleo aún mayores: Catamarca cayó un 26,4%; La Rioja, 19,6%; Santiago del Estero, 14,8%; Tucumán, 11,4% y Jujuy, 8,1%.
Al ritmo de la caída del empleo fueron desapareciendo constructoras y subcontratistas en Salta. El Ieric dio a conocer que el mes pasado hubo seis empresas menos que en julio de 2018. Sobrevivieron 411 firma del sector.
Cemento
Otro indicador clave para conocer la situación de la construcción es el consumo de cemento. Las estadísticas de la Asociación de Fabricantes de Cemento Portland (AFCP) marcan que en julio la compra de ese material en la provincia fue un 4,3% menor con respecto al mismo mes del año pasado. Se comercializaron 26.719 toneladas de cemento el mes anterior. Entre enero y julio los corralones locales vendieron 190.976 toneladas del pegamento, un 20% menos en relación a igual período de 2018.
Al analizar los despachos del material por cómo se comercializan, se distinguen dos realidades distintas. La venta de cemento en bolsa, formato que adquiere generalmente el sector privado, aumentó un 3,2% en Salta en comparación a julio de 2018. De todas maneras, el acumulado de compra de bolsas durante los primeros siete meses del año cayó un 15% interanual.
Por otro lado, el consumo a granel, requerido sobre todo para obras públicas, registró un descenso del 21% en julio con respecto a igual mes de 2018. En el acumulado de enero-julio se vendió un 31% menos que el año pasado.
Lo que salva
El secretario general de la delegación salteña de la Unión Obrera de la Construcción (Uocra), Rubén Aguilar, explicó a El Tribuno que si no fuera por el empleo que generan las mineras, que están encarando diversos proyectos en la Puna y la recomposición de las vías del Ferrocarril Belgrano, en la provincia la caída del empleo sería aún mayor. "Gracias a eso no estamos peor", dijo el dirigente sindical.