Una vez concluido también el proceso en Londres, la votación de este miércoles en la Eurocámara posibilita la ratificación parlamentaria del Brexit, al cabo de intensas gestiones entre la capital británica y Bruselas.
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Una vez concluido también el proceso en Londres, la votación de este miércoles en la Eurocámara posibilita la ratificación parlamentaria del Brexit, al cabo de intensas gestiones entre la capital británica y Bruselas.
Así las cosas, el Reino Unido abandonará la Unión Europea de manera armoniosa en la madrugada del 31 de enero al 1 de febrero, después de la aprobación de hoy por 621 votos a favor y 49 en contra, con 13 abstenciones.
En este contexto, apenas terminó la votación, los eurodiputados tomados de las manos se pusieron a cantar "Auld Lang Syne", una tradicional canción escocesa, para despedir a los británicos del recinto parlamentario.
El mayor obstáculo para este divorcio entre Londres y Bruselas ha sido la oposición en la Cámara de los Comunes británica, donde el acuerdo fue rechazado en hasta tres ocasiones.
En ese recinto británico, la iniciativa se aprobó finalmente el pasado viernes 20 de diciembre, lo que facilitó al primer ministro Boris Johnson cumplir su promesa para culminar el Brexit en la fecha fijada, este 31 de enero.
La luz verde obtenida en la Eurocámara era el penúltimo paso en Bruselas para que el Reino Unido pudiera abandonar la Unión Europea con un acuerdo.
Tras este voto favorable solo queda la adopción del texto por parte del Consejo, que sucederá entre el jueves y el viernes y en donde no debería haber inconvenientes para su aprobación por mayoría simple.
Se tratará éste del primer divorcio de la historia en el bloque europeo, lo que motivó lágrimas en la despedida de los legisladores británicos en la sesión de este miércoles en la Eurocámara, a dos días del Brexit.
El Reino Unido, de todos modos, seguirá respetando las reglas europeas durante un período de transición hasta finales de año, se informó a la prensa, antes de terminar definitivamente con 47 años de tumultuosa relación con la Unión Europea.
En las últimas horas, Washington, cuyo jefe de la diplomacia Mike Pompeo viajó este miércoles al Reino Unido, convirtió en una prioridad cerrar un acuerdo comercial con el gobierno británico de Johnson en 2020, generando recelos en Europa.
Finalmente, los diputados del parlamento escocés, mayoritariamente a favor de la independencia de esta nación semiautónoma, decidieron mantener la bandera europea que ondea frente a su edificio después de que el Reino Unido abandone la Unión Europea el viernes que viene.