Las intensas lluvias en la zona de precordillera dejaron a alrededor de 50 familias sin techo y sin agua para el consumo en la zona del paraje El Toro, San Bernardo, El Rosal y Potrero de Chañi, en la jurisdicción de Campo Quijano.
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Las intensas lluvias en la zona de precordillera dejaron a alrededor de 50 familias sin techo y sin agua para el consumo en la zona del paraje El Toro, San Bernardo, El Rosal y Potrero de Chañi, en la jurisdicción de Campo Quijano.
Producto de las fuertes tormentas de lluvia y granizo caídas en estos últimos días la compleja red de caminos de montaña quedó estropeada, el acceso a los parajes solo se logra en camionetas 4x4 y a pie, en medio de los lodazales que se formaron por el frágil suelo de la zona. Varios aludes bajaron de las altas cumbres y terminaron de desdibujar los accesos a los puestos de los lugareños.
El Consejo del Pueblo Tastil informó a El Tribuno que los caminos de la zona están cortados por el momento. La zona de precordillera antes de mezclarse con la Puna está siendo recorrida por un comité de funcionarios municipales y los referentes de la comunidad originaria.
El intendente de Campo Quijano informó que se enviaron bidones de agua, plásticos y víveres para las familias afectadas. Se estima que recién este fin de semana llegará este grupo de ayuda a todos los diferentes parajes afectados por estos temporales que se vienen dando en la zona profunda de la precordillera, que comprende un radio de alrededor de 500 kilómetros.
Los ojo de agua quedaron afectados por el barro
"Algunos parajes están muy alejados y fuera del camino de acceso normal. De todas las familias se llegó a numerosos puesteros afectados por las lluvias de verano, que cada temporada son muy intensas y dañinas. Hay pobladores que no sabemos cómo están por la lejanía de sus casas. Hace falta agua y comunicación con estos parajes", remarcó Manolo Copa, del Consejo Originario del Pueblo Tastil.
Se llevaron los equipos de radio
Inexplicable actitud dejó incomunicados a los pobladores
Los equipos de comunicaciones instalados el año pasado para sacar del aislamiento a los pobladores ante los desastres naturales, similar a este inicio de año, curiosamente fueron retirados por personal municipal para ser acondicionados. “Es inconcebible lo que ha ocurrido. Años atrás, por los desastres ocasionados por las lluvias, que ocasionaron hasta muertes de lugareños, se decidió formar a través Comité de Emergencias Municipal (COEM) una red de comunicación con radio VHU que permita comunicarse con el hospital y otros parajes para saber del estado en general de los habitantes de estos perdidos parajes de precordillera. “Se llevaron los equipos antes de fin de año; ahora no podemos comunicarnos con nadie. O sea, volvimos a quedar incomunicados con las familias de estos parajes”, comentó Copa.
Miembro del comité de ayuda en el lugar
A pesar de ello se logró asistir en estas horas a 71 personas, se les llevó agua en bidones, plástico para cubrir los techos y mercadería. El problema se suscita en los lugares en donde no se puede avanzar por el estado de los caminos.
“Los ojos de agua quedaron atiborrados de agua y barro. El suelo con arena y arcilla no ayuda mucho. Los pozos están tapados. No tienen agua”, afirmó el baqueano.