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COVID-19: en la primera semana, pocas personas ingresaron a la carpa del San Bernardo

Como hubo pocos casos esta semana, había camas disponibles en el nosocomio y en el Centro de Convenciones. Esperan que haya un pico de consultas los próximos días y consideran que puede superarse la capacidad de las camas de los hospitales.
Sabado, 10 de octubre de 2020 16:00
Foto: Jan Touzeau

Desde el lunes último, alrededor de dos personas por día ingresaron a la carpa que se instaló al lado del hospital San Bernardo. Debido a la poca cantidad de casos de COVID-19 que hubo los últimos días, en poco tiempo lograron conseguir camas para estos pacientes porque había lugar disponible en el Centro de Convenciones y en el nosocomio.

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Desde el lunes último, alrededor de dos personas por día ingresaron a la carpa que se instaló al lado del hospital San Bernardo. Debido a la poca cantidad de casos de COVID-19 que hubo los últimos días, en poco tiempo lograron conseguir camas para estos pacientes porque había lugar disponible en el Centro de Convenciones y en el nosocomio.

El coordinador de este espacio, Facundo Iñiguez, advirtió que esperan que haya más demanda la semana próxima, debido al aumento de la movilidad de los ciudadanos durante los días pasados. "Estamos esperando que haya un pico dentro de una semana debido a que se levantaron las medidas de contingencia. Al aumentar el contacto social, esperamos que vuelva a haber muchos casos en una semana más", comentó.

"Puede haber tanta consulta, que puede llegar a superarse el número de camas en los hospitales", señaló y explicó que, cuando la internación se vea superada, recién se va a pasar a la carpa y desde allí los derivarán a otros centros de atención.

Medidas de soporte

En la carpa, reciben a pacientes que tengan síntomas de COVID-19 y que necesiten atención de salud. La idea es que estén en este lugar menos de seis horas. Durante este tiempo, se los compensa y se les dan medidas de soporte. Una vez que se evalúan sus cuadros -sobre todo, su capacidad respiratoria- y, dependiendo de si son leves, moderados o graves, se decide si pueden volver a sus casas, si necesitan ir a una sala común en un hospital o a una cama de terapia intensiva.

En este espacio, hay unas 50 camas con oxígeno, 2 médicos y 10 enfermeros de manera permanente. Los pacientes pueden llegar en ambulancia o por sus propios medios. Los primeros, por lo general, tienen cuadros más complicados y los segundos, en su mayoría, no tanto. En casos de extrema urgencia, se cuenta con los medios necesarios para darles soportes avanzados mediante intubación o respiradores portátiles, hasta que se les consiguen camas de terapia intensiva.

Uno de los criterios para definir si se los interna es si oxigenan bien su sangre o no. El oxímetro de pulso sirve como guía, pero lo principal es la evaluación clínica. "Un paciente puede estar oxigenándose normalmente, pero a expensas de un gran esfuerzo respiratorio. Quizás satura a 96, pero lo mantiene porque usa todos los músculos accesorios de la respiración. Entonces, a pesar de que ahora se mantiene bien, capaz se agota en dos o tres horas. Si satura bien, con una buena mecánica respiratoria, ahí nos quedamos tranquilos", explicó Iñiguez.

Comunicación fluida

El médico contó que están en contacto permanente con las guardias de todas las clínicas y hospitales para saber si están en condiciones de recibir a los pacientes que ingresan a la carpa o no. Aseguró que en este momento la comunicación entre los distintos centros médicos es fluida y no constituye un problema.

"Por ahora nos comunicamos personalmente con los coordinadores a cualquier hora en el caso de que queramos hacer una derivación. No hay grandes inconvenientes en esto", expresó.

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