El sector privado y los trabajadores autónomos e independientes de Salta observan con preocupación el futuro de sus respectivas actividades luego de que Nación informara la situación sanitaria de la provincia.
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El sector privado y los trabajadores autónomos e independientes de Salta observan con preocupación el futuro de sus respectivas actividades luego de que Nación informara la situación sanitaria de la provincia.
Las "restricciones de circulación y encuentros sociales", que anunció el presidente Alberto Fernández, dejaron a 18 provincias expectantes por conocer con precisión cuáles serán las normativas que regirán hasta el 25 de octubre. El Comité Operativo de Emergencia se reunirá el lunes, luego de conocer las disposiciones del decreto nacional para los departamentos salteños más comprometidos. Sin embargo, desde el Ejecutivo provincial anticiparon que se prevén medidas dispares. "Salta capital seguro continuará en etapa de aislamiento por 14 días más y el departamento San Martín, donde hubo una mejora importante, casi seguro que pasa a distanciamiento", indicó Matías Posadas, secretario general de la Gobernación.
Esta posibilidad puso en alerta a comercios, gastronomía, empresas no esenciales, gimnasios y hasta peluqueros, quienes temen que deberán cerrar nuevamente sus puertas.
No obstante, en caso de que se decidiera el aislamiento para Capital, Posadas indicó: "Seguramente podemos continuar con algunas actividades habilitadas, como comercio y gastronómicos".
Si bien hay algunos grupos que hablan de la posibilidad de abrir sus negocios pese a una eventual prohibición, la mayoría parece aceptar con resignación la determinación oficial, aunque dejaron en claro que la situación económica es ya insostenible y que no podrán soportar otro parate.
Aseguran que no hay una certera ayuda estatal que les permita sobrellevar esta inusual situación.
El empresario salteño Alberto Antonini manifestó: "Si el Gobierno decreta que tenemos que cerrar, cerraremos; lo que nosotros opinemos puede ser distinto, pero los que mandan mandan".
El empresario consideró: "Si cada uno hace lo que quiere, es un drama la situación, habrá que hacer caso". Aunque Antonini deslizó: "Esperamos que no se equivoquen de nuevo", porque todo esto "es un disparate, una cosa que no estuvo bien pensada, y los resultados los estamos viendo: si lo que se buscaba era que no haya contagios, está visto que no dio resultado".
El empresario cuestionó que "a las decisiones las toma gente que no paga quincena o que igual cobra a fin de mes".
Finalmente, advirtió: "Volver a normalizar la situación va a tomar mucho tiempo, por eso cuanto antes volvamos, mejor; claro que con protocolos, como debe ser".
Tupac Puggioni, empresario del sector gastronómico, advirtió que "la situación es muy grave", y que "si hay algo que nos afecta mucho es no tener previsibilidad".
"El delivery no está ayudando mucho. Nosotros antes teníamos una cocina con una carta muy grande, con cocina de alta montaña, cocina regional, pastas y parrilla, pero hoy solo vendemos pizzas, empanadas y sándwiches, porque no podemos arriesgarnos a invertir en insumos para la cocina y que nos cierren al otro día, como ya pasó", detalló.
Cautela de instituciones
Un eventual retorno al aislamiento tiene en vilo a los sectores económicos de Salta. Daniel Betzel, presidente de la Cámara de Comercio, pidió esperar las definiciones. “Cualquier restricción hoy en día nos afecta”, resaltó. El sector comercial espera con optimismo las decisiones que sean injerencia del Ejecutivo provincial. “El Gobierno provincial sabe de nuestra situación, y por eso hizo un esfuerzo sin precedentes con un ATP provincial para ayudar al sector”, le dijo Betzel a El Tribuno.
En el sector de los gastronómicos, el ánimo es el mismo. Eduardo Kira, presidente de la Cámara de Hoteleros, Gastronómicos y Afines, indicó que “hay que esperar” definiciones.
“Estamos mal, es difícil estar peor”
Propietarios de comercios creen que no podrán sostenerse.
Tupac Puggioni, propietario de uno de los locales más tradicionales del Corredor de la Balcarce, señaló: “Nosotros ya estamos muy mal, es difícil estar peor. El mes pasado estuvimos cerrados”. Pero consideró: “Incluso si nosotros no hacemos espectáculos y funcionamos hasta las 2 no va a funcionar la Balcarce”.
Finalmente, dijo: “Está visto que la vacuna se va a demorar hasta el año que viene, pero no hay forma de que se pueda seguir con los locales cerrados hasta ese momento”.
“Si la semana que viene nos cierran nuevamente, trataremos de seguir con delivery y ver si encontramos una manera para sostenernos”, concluyó.
Desde el Centro de Peluqueros, Pablo Copa consideró que “sería terrible” si vuelven a cerrar todas las actividades.
“Es cierto que el coronavirus es muy complicado, pero creo que no es necesario cerrar todo”, evaluó Copa, y se mostró a favor de que todas las empresas cumplan con horarios y protocolos estrictos para sostener la actividad.
El peluquero afirmó que “no se puede parar la provincia, cuya única industria que funcionaba era el turismo, pese a tener ganadería, agricultura y hasta minería”.