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María Ovando, condenada a 20 años de prisión: denuncian que la causa “está armada”

Organizaciones sociales aseguran que el fallo de la Justicia de Misiones es por “estigmatización”. Es la segunda vez que va presa porque la consideran una “mala madre”.
Miércoles, 28 de octubre de 2020 18:12

El Tribunal Penal 1 de Eldorado condenó este miércoles a 20 años de prisión a María Ovando, al considerar que fue responsable de “haber permitido o no haber impedido el abuso sexual” de una de sus hijas y de su nieta. En el mismo fallo, sentenció a 18 años a Marcos Iván Laurindo y 12 a Lucas Sebastián Ferreira, como autores del delito de “abuso sexual con acceso carnal”. Unas horas antes, distintas organizaciones feministas e integrantes del Equipo Misionero de Derechos Humanos, Justicia y Género advirtieron que la mujer es “víctima de una causa armada”.

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El Tribunal Penal 1 de Eldorado condenó este miércoles a 20 años de prisión a María Ovando, al considerar que fue responsable de “haber permitido o no haber impedido el abuso sexual” de una de sus hijas y de su nieta. En el mismo fallo, sentenció a 18 años a Marcos Iván Laurindo y 12 a Lucas Sebastián Ferreira, como autores del delito de “abuso sexual con acceso carnal”. Unas horas antes, distintas organizaciones feministas e integrantes del Equipo Misionero de Derechos Humanos, Justicia y Género advirtieron que la mujer es “víctima de una causa armada”.

Ovando quedó detenida inmediatamente y en la puerta del juzgado la Policía "reprimió violentamente a la prensa y a la familia que quiso acercarse a María", contó a Télam José Luis Fuentes, uno de los abogados de Ovando.

El fallo fue considerado "escandaloso" por la defensa, que anticipó que apelará y recurrirá a organismos internacionales de derechos humanos.

La Fiscalía, que había pedido la pena de 22 años de prisión para María, 18 años para Marcos y 15 para Lucas, se mostró conforme con el fallo. “Está probado que los abusos comenzaron en agosto de 2013. Es la prueba la que está diciendo esto, no yo. Son las tres Cámaras Gesell, los certificados médicos y los peritos que opinan en la causa. Es la prueba la que indica la existencia del suceso”, señaló el fiscal Federico Rodríguez ante los medios al terminar la ronda de alegatos. En tanto, la defensa de los acusados anticipó que apelará la sentencia y calificó el fallo de “injusto”.

"María vivía en la extrema pobreza, a los 37 años había parido 12 hijos. Fue madre a los 14 años, parió sus primeros hijos e hijas en medio de golpes y en algunos casos en la más extrema soledad. El Estado solo apareció en su vida para juzgarla", relataron desde el Equipo.

Las defensas habían solicitado la absolución de los tres acusados, ya que según dijeron, no se estableció cómo y cuándo ocurrieron los hechos, además de señalar algunas fallas en la realización de las Cámaras Gesell.
Ovando no vivía con sus hijas, según contaron sus abogados, desde marzo de 2015 por disposición de la jueza Margarita Potschka, quien decidió retirarle la guarda de sus hijas menores.

Segundo proceso

El proceso que terminó hoy fue el segundo en juzgar a Ovando. El primero fue en 2012 y la puso a ella tras las rejas acusada de dejar morir a uno de sus hijos por desnutrición. “Esta vez la responsabilizan de no haber evitado los abusos sexuales de una hija y una nieta. Construyeron una acusación que pretenden sostener con el testimonio de las niñas en una Cámara Gessel donde claramente se las revictimizó y se las manipuló en la búsqueda de incriminar a María”, dijeron integrantes del equipo de derechos humanos durante un conversatorio virtual en el que reclamaban su absolución.

Además, afirmaron que “los alegatos del fiscal Federico Rodríguez hay que analizarlos por la descarga de odio que demostró”. “En tres horas atacó primero a los defensores de María, después a plantearla a ella como si fuese un monstruo, y trajo testimonios que ya habían sido descartados por inverosímiles o falsos, e insistiendo con la idea de que era necesario un ‘castigo ejemplar’”, argumentaron.

Un mes atrás, los mismos referentes ya habían pedido la recusación del fiscal Rodríguez por “hostigamiento y estigmatización” hacia María Ovando.

  • “Encarcelada en el 2011 por la muerte de Carolina, su pequeña hija que se murió en sus brazos mientras intentaba llegar a un hospital de la zona. María vivía en la extrema pobreza, a los 37 años había parido 12 hijos. Fue madre a los 14 años, parió su primeros hijos e hijas en medio de golpes y en algunos casos en la más extrema soledad. El Estado solo apareció en su vida para juzgarla”, aseguraron.

  • “María fue absuelta en noviembre del 2012, tras una campaña nacional del movimiento de mujeres que visibilizó la trama de criminalización de mujeres del gobierno de la provincia de Misiones”, indicaron en la petición, y afirmaron que “su absolución no significó el cese de la persecución, el hostigamiento y la revictimización de parte del Poder Judicial”.

El 7 de octubre pasado, la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento del Mercosur (Parlasur) aprobó por unanimidad un proyecto de declaración sobre el caso de María Ovando. En el mismo se insta a la justicia misionera a que dicte fallos “con enfoque de género, que cese la persecución y hostigamiento judicial sobre su persona” y pide la intervención de la CIDH en el seguimiento del tema.

El proyecto

El Parlasur declaró en el artículo 1 del proyecto que “la justicia misionera sentencie con perspectiva de género” y denunció “vestigios patriarcales” y una “clara criminalización de la pobreza”.

“Solicitamos el cese de la persecución y hostigamiento judicial sobre su persona”, indica en el artículo 2, y exige el “debido proceso libre de discriminación y violencia institucional sobre quien es víctima de un sistema que no le ha garantizado desde su nacimiento derechos fundamentales para su desarrollo como persona”, destaca la declaración.

El artículo 3 requiere “a los organismos y autoridades competentes de la provincia de Misiones que brinden a la señora María Ovando y a sus hijos la asistencia humanitaria, económica y psicológica”.

"El fiscal no ha presentado ni una sola prueba"

Por su parte, la antropóloga Ana Gorosito, quien participó hoy en Posadas de una manifestación que llevaron adelante organizaciones sociales y feministas pidiendo la liberación de Ovando, consideró "insólito" el fallo judicial.
"Son penas altísimas de prisión por una causa que está mal armada, donde el fiscal no ha presentado ni una sola prueba", expresó.
"Estamos ante un varadero escándalo judicial", afirmó la profesional, que sostuvo que "esto debe conmover al sector sano del Colegio de Abogados y en general de los operadores de justicia en Misiones".

La inclusión de la perspectiva de género y derechos en la investigación y la liberación de Ovando fueron pedidas en una nota firmada por 16 mil personas y organizaciones del país.

En el mismo sentido se pronunció el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad y el Parlamento del Mercosur.

  • Desde el Equipo Misionero de Derechos Humanos, Justicia y Género manifestaron que van "a seguir luchando por justicia y reparación para quienes hoy fueron condenados y para las hijas y la nieta de María Ovando".

Fuente: tn.com.ar y agencia Télam

 

 

 

 

 

 

 

 






Luego de su absolución en 2012, ella inició una causa civil contra el Estado, contra el juez de esa causa, Roberto Saldaña y el fiscal, por daños y perjuicios por el tiempo que estuvo presa injustamente.

En esta nueva causa, hoy se la condenó por "haber permitido o no haber impedido el abuso sexual de las niñas de su familia, cuando las mismas ya no vivían con ella por disposición de la jueza Margarita Potschka, quien en una audiencia realizada el 10 de marzo de 2015, con graves irregularidades, decidió retirarle la guarda y entregárselas a los supuestos abuelos paternos", explicaron sus abogados.

El proceso es complejo por la imprecisiones de la investigación: se inició en 2015 a partir de la denuncia de la abuela paterna, pero los abusos habrían ocurrido cuando ya no convivían con Ovando; finalmente, el fiscal elevó la causa a juicio el año pasado.

Mientras, Ferreyra y Laurindo que hoy también fueron condenados, llegaron al juicio con una prisión preventiva de 5 años vencida; el primero fue novio de una hija de María y el otro amigo de la familia.

La justicia "lejos de investigar la verdad y proteger a las niñas falla para encubrir la gran cantidad de irregularidades cometidas por los agentes judiciales en este caso", resaltaron desde la defensa.

Fuentes reconoció a Télam que esperaban "un fallo absolutorio".

"No hubieron pruebas que se desarrollen en su contra y, al contrario, nuestra hipótesis de que podría haber sucedido en el entorno de la guardadora denunciante, fue comprobada hasta el último día de audiencia, donde apareció un expediente que había un condenado en las misma fecha concomitante, entonces teníamos tranquilidad en ese sentido y nos sorprendió totalmente", afirmó.

"También hay una cuestión muy significativa: María fue detenida inmediatamente, nosotros habíamos realizado una presentación teniendo en cuenta que ella todas las veces se había presentado, sin embargo el tribunal determinó su inmediata detención lo cual también es algo muy grave, violatorio del derecho interno e internacional", añadió.

El abogado resaltó que "se le dio todo lo que pidió el fiscal que, audiencia tras audiencia, llevó adelante su imputación con un discurso de odio, carente absolutamente de perspectiva de género y de derechos".
 

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