Mencionar el nombre de Lito Luna es relacionarse directamente con el mundo de la danza. Artista, docente y coreógrafo productor, que llevó su talento a lo largo y ancho del país. No es un año cualquiera, durante el 2020 está cumpliendo las Bodas de Oro con el baile. Mucha agua corrió desde aquel día de 1970, alegrías y tristezas, logros y frustraciones, reconocimientos e injusticias se fueron alternando en el camino, pero “el saldo fue netamente positivo, tuvo el privilegio de desempeñarme en lo que más amaba en la vida: la danza”.
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Mencionar el nombre de Lito Luna es relacionarse directamente con el mundo de la danza. Artista, docente y coreógrafo productor, que llevó su talento a lo largo y ancho del país. No es un año cualquiera, durante el 2020 está cumpliendo las Bodas de Oro con el baile. Mucha agua corrió desde aquel día de 1970, alegrías y tristezas, logros y frustraciones, reconocimientos e injusticias se fueron alternando en el camino, pero “el saldo fue netamente positivo, tuvo el privilegio de desempeñarme en lo que más amaba en la vida: la danza”.
El Ballet Folclórico Latinoamericano (que lleva su nombre) prepara una serie de actividades artísticas virtuales.
El espectáculo debe continuar...
El mundo del espectáculo sigue su camino, adecuándose a este nuevo tiempo. Si bien nos aleja de lo presencial pero nos acerca en lo virtual.
Cinco décadas vinculado al mundo de la danza
Es por ello que haciendo una síntesis de 50 años con la danza, la educación y el espectáculo, es difícil encontrar palabras o plasmar emociones de casi toda una vida, conceptos que van surgiendo del recuerdo. Son múltiples experiencias, anécdotas por doquier, demasiadas cosas lindas y también tristes. A lo largo de este tiempo uno palpa esa riqueza que atesora a través del conocimiento adquirido, y que las trasmite por medio de la enseñanza. También queda en el recuerdo puertas que se abrieron... o que se cerraron.
¿Cuál es el resumen?
Todo tiene un sentido, fui encontrando en el camino cosas valiosas que me permiten hoy saber dónde me encuentro parado, y no las quiero perder mientras tenga la posibilidad de disfrutarlas. Esas cosas son como un tesoro que se comparte con la familia, con los amigos que creyeron en mí, y también con los colegas (algunos de ellos me marcaron un rumbo por los caminos del arte). Ese fue el alimento que fue creciendo como una necesidad desde el mismo momento que inicié esta profesión, allá por 1970 en Estación Perico, una localidad jujeña al sur de la provincia, donde incursioné con mi primer centro de formación educativa y artística, que fue creciendo año a año.
¿Cuándo llegaste a Salta?
En 1977 me instalé en la ciudad de Salta para seguir estudios superiores, ya en la década de 1980 cursaba la Licenciatura en Comunicaciones Sociales, en la Universidad Católica. Además, seguía con el folclore para poder costear mis estudios. Me vi en la necesidad de abrir en Salta ese ansiado centro de formación integral para los estudiantes de danzas folclóricas. Así surge, la escuela que hoy se conoce como La Escuela Latinoamericana de Arte y Danza de Lito Luna. Con el tiempo la Sociedad Española de Salta me dio la posibilidad de alquilar sus instalaciones. Aún me mantengo en esa sede.
Llegó el despegue profesional...
Empezaron a llegar las constantes giras internacionales. Se abrieron filiales en diferentes localidades de Salta y Jujuy, la producción de los espectáculos fue una constante, me permitió crecer como profesional. Además, llevar al escenario mitos, leyendas, innumerables musicales, comedias musicales, obras de creación. Nunca hubo tiempo para participar en las competencias, porque siempre prioricé la formación académica de los alumnos.
¿Te destacaste también en la docencia?
En el año 1995, al cumplir mis bodas de plata (25 años), la Secretaria de Cultura de la Nación se adhirió a esa celebración, con la actuación de Zamba Quipildor en el Teatro de la Ciudad. En el año 2000 ingresé como docente en el Centro polivalente de Arte, y luego al ISPA (Instituto Superior de Profesorado de Arte). En el 2014 asumí como director del Ballet Folklórico de la Provincia de Salta, cargo por concurso, hasta el año 2017. He creado obras como: “Ocurrencia de Molina Campos”, “El retorno del Coquena”, “Bicentenario de la creación de Los Infernales”, y “Juana Azurduy”. Al dejar el cargo volví al sistema de la educación no formal, a mi querida escuela de danza donde continúo impartiendo conocimiento.
¿Sos un referente de la danza?
Formo parte de numerosas instituciones civiles, soy miembro del órgano consultor de la Academia Nacional de Folklore. Participé como jurado en numerosos competencias folclóricas y de tango. Intervine como disertante en numerosos congresos y simposios nacionales. Me representó un gran orgullo haber sido el coreógrafo, junto al realizador Jorge Padovan, en documentales como ”Volvió a nacer“ y ”El sueño de Pascuas“, que ganaron numerosos premios internacionales.
¿Fuiste un afortunado?
Es difícil hablar de uno mismo o hacer una síntesis de vida, hay una historia donde juegan muchos factores, sería injusto nombrar unas y olvidar otras, todas fueron importantes. cada eslabón encaja, como un rompecabezas, en el tablero del destino. A lo largo de mi vida profesional pasaron muchos elencos que surgieron del alumnado de la escuela de danza. Junto a ellos viví grandes emociones en las giras, representado a Salta y al país en escenarios provinciales, nacionales e internacionales. Esta realidad me permitió recibir innumerables reconocimientos, menciones y premios.
Variada actividad
“Pese a esta pandemia del COVID-19 los compromisos virtuales siguen latentes, nada detiene al arte” remarcó Lito Luna, en cuanto a los desafíos que se aproximan. La programación prevista entre el 31 de octubre y el 12 de diciembre es la siguiente:
Ayer sábado se realizó el Primer Encuentro Internacional de Danzas Folclóricas: Esencia de mi Tierra, Bodas de Oro. Fue un homenaje a la trayectoria de Lito Luna, organizado por el Ballet Folklórico Latinoamericano.
Participaron los países de: México, Panamá, Costa Rica, Perú, Colombia, Chile, Paraguay y Puerto Rico, en forma virtual.
3 al 8 de noviembre: 1º Festival Internacional de Danzas Folclóricas Panamá 2020, organizada por la Compañía Nacional Folclórica de ese país, camino al bicentenario de su Independencia 2021. Intervendrán 15 países.
12 de noviembre: Festival Nacional de Danzas Folclóricas: Esencia de mi Tierra, Bodas de Oro. Nuevo homenaje a la trayectoria de Lito Luna, con las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Misiones, Catamarca, Tucumán Jujuy y Salta.
19 al 22 de noviembre: disertará en el XIII Congreso Internacional de Folclore, organizado por Cendaf de Perú.
25 al 27 de noviembre: 4º Rhythms Internacional de Folclore, organizado por la Chandigarh University de la India, participan 30 países de todo el mundo.
12 de diciembre: Festival Provincial de Danzas Folclóricas, Esencia de mi Tierra, bodas de oro. Tercer y último homenaje a la trayectoria de Lito Luna. Con este último evento se cerrará la actividad 2020.