En las expectativas y plazos que maneja el ministro de Transporte de la Nación, Mario Meoni, el ambicioso proyecto de recuperación del Ferrocarril Belgrano Cargas estará terminado en tres años, al final del mandato del presidente Alberto Fernández. El plan de obras se inició con un crédito chino de US$2.470 millones en los últimos años de la segunda presidencia de Cristina Fernández y se acentuó durante la gestión de Mauricio Macri, cuando se sumó otro préstamo de US$1.600 millones. A fines de mayo pasado los trabajos sobre la vías se paralizaron en la parte salteña porque se cortó el financiamiento desde China producto del virtual default en el que había entrado el país hasta que se pudo renegociar la deuda externa. Finalmente, las tareas se reiniciarán en la segunda mitad de este mes, según dio a conocer Meoni ayer en Salta en el acto que compartió con el gobernador Gustavo Sáenz y el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa.
Luego de la ceremonia, el funcionario adelantó a El Tribuno que en los planes también está previsto acordar con China el financiamiento de la recuperación del ramal C15, que une el norte provincial con Bolivia.
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En las expectativas y plazos que maneja el ministro de Transporte de la Nación, Mario Meoni, el ambicioso proyecto de recuperación del Ferrocarril Belgrano Cargas estará terminado en tres años, al final del mandato del presidente Alberto Fernández. El plan de obras se inició con un crédito chino de US$2.470 millones en los últimos años de la segunda presidencia de Cristina Fernández y se acentuó durante la gestión de Mauricio Macri, cuando se sumó otro préstamo de US$1.600 millones. A fines de mayo pasado los trabajos sobre la vías se paralizaron en la parte salteña porque se cortó el financiamiento desde China producto del virtual default en el que había entrado el país hasta que se pudo renegociar la deuda externa. Finalmente, las tareas se reiniciarán en la segunda mitad de este mes, según dio a conocer Meoni ayer en Salta en el acto que compartió con el gobernador Gustavo Sáenz y el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa.
Luego de la ceremonia, el funcionario adelantó a El Tribuno que en los planes también está previsto acordar con China el financiamiento de la recuperación del ramal C15, que une el norte provincial con Bolivia.
Se activan las obras del Belgrano Cargas en Salta...
El Belgrano Cargas incluye varias etapas y ramales. Los ramales que venían en ejecución y están paralizados los retomaremos ahora en noviembre. La semana que viene las empresas van a estar percibiendo los pagos correspondientes, por lo tanto vamos a facturar las actas de reinicio de obras. Algunas estaban sin paralizarse, pero a ritmo lento y ahora este desembolso de fondos por parte de China nos permite arrancar a full. La parte del Estado argentino se había pagado totalmente con lo cual no hay razón por la que no inicien. El único retraso que van a tener las obras con respecto al plazo inicial será solamente los cinco o seis meses que tuvieron paralizadas, primero por la pandemia y después por la falta de pago.
Había otras obras que ya estaban licitadas para la recuperación de vías, ¿qué pasará en ese caso?
Con respecto al resto de las obras con que vamos a avanzar tienen que ver con la etapa o adenda cuatro del acuerdo con China, que ya están licitadas. Son cuatro obras que van a comenzar entre abril y diciembre del año próximo como máximo. El punto más lento en el inicio va ser el tramo entre Metán a Palomitas. Todas esas obras tienen un plazo de ejecución entre 18 a 24 meses. Y la etapa quinta son obras que tenemos que licitar. El 16 de este mes vamos a firmar con China el financiamiento de un tramo donde la inversión mayor será el C15 (la parte salteña de ese ramal es entre Pichanal y Salvador Mazza y en Jujuy va desde Perico a Ledesma), que serán 16.500 millones de pesos. El proceso de licitación estimo que nos va a demandar unos seis meses.
¿El reinicio de las obras del Belgrano Cargas significa una redeterminación de precios?
Sí, claro. Lo que estamos discutiendo es el tiempo de paralización de obras, porque entendemos que por eso no nos corresponde pagar un costo diferencial porque no fue una decisión del Gobierno paralizar las obras, de hecho la parte de pago del Gobierno argentino se hizo en tiempo y forma. Nosotros nunca dejamos de pagar el 20% que correspondía a la parte argentina, nos falta el 80% de la parte china, pero sí claramente tiene que haber un reconocimiento de redeterminación de precios en función a los ajustes que correspondan de acuerdo a los pliegos de licitación de cada una de las obras.
¿Qué va a pasar con el ramal C14, que otorga un camino hacia los puertos de Chile y también, no menos importante, ofrece el servicio turístico del Tren a las Nubes, el cual quedó reducido a la mínima expresión en su recorrido?
Estamos trabajando. La explotación del Tren a las Nubes la tiene la Provincia. Estamos hablando con el gobernador para ver cómo podemos retomar las obras. Obviamente, creemos que tenemos que recuperar ese ramal. Desde el punto de vista turístico es súper importante y en la Argentina estamos tratando de desarrollar actividades económicas que generen trabajo en las regiones y ese tren la genera, por lo tanto tiene razonabilidad la inversión. Lo que estamos haciendo es priorizar las obras en función del desarrollo económico de cada región y bajo esa razonabilidad invertimos. No podemos priorizar todo. Hoy la capacidad de inversión de la Argentina está reducida. Así que a los recursos tenemos que tratar de utilizarlos bien. El Presidente nos ha conseguido una buena proporción del Presupuesto nacional para las obras de infraestructura ferroviaria. En ese sentido estamos no solamente con endeudamiento internacional sino con financiamiento presupuestario nuestro afrontando muchas obras, entre las que están la restauración de las vías y en otros casos la incorporación de mucho material rodante que estamos comprando en algunos casos a China y en otros hay un proceso licitatorio en el que están compitiendo franceses, rusos y en otros casos, lamentablemente menores, la industria argentina.
Sobre los atrasos en el pago de subsidios a los colectivos de transporte público de pasajeros...
(Interrumpe) Quiero aclarar que no es que hubo atrasos, en realidad anticipamos en los primeros cuatros meses del año el pago que se había previsto para todo 2020 y después en la segunda etapa, cuando se pudo contar con el aporte presupuestario para avanzar, empezamos a pagar el resto. Si no, parece que nosotros teníamos la plata guardada y no queríamos pagarle a las provincias y la realidad es que el año pasado el Presupuesto nacional estableció para todo el conjunto de las provincias 6.500 millones de pesos, eso nosotros los pagamos los primeros cuatros meses, con lo cual anticipamos los pagos y después le agregamos otros $10.000 millones para el resto del año que estamos ejecutando y pagando. No tiene que ver con los retrasos sino que decidimos triplicar los pagos que había y por eso se retrasó. Hay una lectura errada y se tiene que analizar también qué es lo que los gobernadores habían firmado durante la instancia del Pacto Fiscal, con el que se comprometieron a sus provincias a hacerse cargo de las compensaciones del transporte y la Nación solamente quedaba limitada a esos $6.500 millones. Por decisión del Presidente, ampliamos ese monto y vamos a estar ampliando aún más para el año que viene con un aumento que nos va a permitir llegar a cerca a los $24.0000 millones para todas las provincias para 2021.
¿Lo que se aumentó en subsidios equipara los incrementos de gastos que tuvieron los sistemas de transportes en las provincias?
Nosotros estamos garantizando el pago del salario a la totalidad de los trabajadores del transporte público con los subsidios y eso me parece que es lo más significativo. Estamos asumiendo algo que en realidad deberían haber asumido las provincias. Yo entiendo que se modificaron las situaciones de la economía, pero no las modificó este Gobierno. Cuando heredamos en diciembre la economía de Macri, es decir los 110.000 millones de dólares de deuda no es algo que acordamos, es lo que recibimos y lo que muchos gobernadores convalidaron. No podemos resolver en el transcurso de un año, y además con pandemia, los desequilibrios que tuvo el país durante cuatro años.