Se llevó adelante una reunión en la Federación de Juntas Vecinales de Bermejo, donde comerciantes, autoridades de ambos países y vecinos cuestionaron la decisión del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasa) de prohibir el ingreso de mercadería argentina a la localidad de Bermejo, afectando a la economía de frontera.
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Se llevó adelante una reunión en la Federación de Juntas Vecinales de Bermejo, donde comerciantes, autoridades de ambos países y vecinos cuestionaron la decisión del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasa) de prohibir el ingreso de mercadería argentina a la localidad de Bermejo, afectando a la economía de frontera.
De la reunión participaron el senador provincial Juan Cruz Curá, el intendente de Aguas Blancas, Sergio Oliva, y el alcalde Delfor Burgos, y el representante de Senasa. En la oportunidad el legislador oranense planteó la necesidad de armar una mesa de trabajo donde se puedan llevar propuestas concretas para ambos países en materia de importación y exportación de pequeños comerciantes para no afectar a la economía de los vecinos, visiblemente perjudicados por la crisis económica, medida que fue aceptada de forma unánime, lo que permitió postergar la decisión que impide la comercialización de algunos alimentos. "Esta situación puso en jaque a cientos de trabajadores de frontera, tanto argentinos como bolivianos, quienes se vieron perjudicados por una decisión que debería ser analizada de manera conjunta buscando el bien común. Como funcionarios públicos es nuestro deber promover los espacios de diálogo y consenso para llevar repuestas a los vecinos", expresó Curá
Alimentos argentinos
Según detallaron, el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) de Bolivia emitió una lista de productos de toda índole que ya no estaban habilitados a ingresar, como solía suceder, a través del río Ber mejo.
Entre los productos de origen animal que ya no podían ingresar a Bolivia estaban: animales vivos (cualquier especie), carnes fresca o refrigeradas (de todas las especies), huevos, cueros y pieles frescas, secas y saladas de cualquier especie, alimentos para perros y gatos. Al igual que los medicamentos de uso veterinario.
Tampoco podían ingresar alimentos lácteos (leche fluida, pasteurizada, queso fresco y yogur), pasta fresca con relleno de origen animal; chacinados y embutidos, carne ahumada, suplementos dietarios, aditivos y bebidas alcohólicas.
La medida también afectaba a los cítricos, semillas, fertilizantes y otros productos de origen vegetal.