La obra de Mora Verón se nutre de la mirada crítica y reflexiva de las Vanguardias. Propone mirarnos, analizar los hábitos y preguntarse sobre lo que se consume. La operación es claramente la de barajar y dar de nuevo. En sus piezas se puede reconocer numerosos elementos que adquieren nuevo sentido, al haber sido reutilizados y reorganizados en otras composiciones, texturas y volúmenes. Con esta información, se puede comprender que re-Auto-tratos es la deconstrucción de la palabra “autorretrato” y una llamada de atención sobre cómo se trata y qué tipo de trato se dispensa a lo que lo rodea (humano y no-humano). Es una invitación a repensar los hábitos, tarea que empieza por casa. La esencia de la muestra en sí misma es proponer la deconstrucción y reorganización de los paradigmas que ya conocemos. Empecemos por los desechos, pero sigamos por las ideas.
Esta muestra forma parte del Ciclo Reactivarte. La artista participará reciclando los residuos y creando con ellos obras de arte en Campo Quijano el sábado 14 y domingo 15, a partir de las 9.
La manera de hacer sus obras, es su manera de pensar: realiza la tarea positivamente, produce desde lo que ya existe y busca la manera de darle una nueva vida a lo que a simple vista podría pensarse como descarte. Desde 2012 dirige el Atelier Morada ubicado en el corazón de Palermo Soho. Es su espacio, allí trabaja y expone sus obras.
Reutilizar, reorganizar y resignificar los materiales son los ejes prácticos fundamentales que dan fuerza a sus obras. Verón tiene una predilección hacia los objetos de la vida cotidiana, la manera de canalizar su lenguaje plástico y forma de expresión es a través de esculturas e instalaciones donde puede explayarse en texturas, volúmenes y patrones, como si fueran marcando distintos ritmos, todo esto en clave figurativa y abstracta. El concepto de suprareciclaje (del inglés, upcycling) es central en su trabajo porque propone dotar de mayor valor a elementos de desecho y, de esta manera, contribuir con el medioambiente.
En 2013, Rogelio Polesello adquirió varias su obras y trabajaron en conjunto en la obra que terminaría siendo el regalo de Polesello a Marta Minujín, para los 70 años de casamiento con el arte.
En 2014 Verón participó en la Feria Arte Espacio en el Hipódromo de San Isidro, tanto con un stand propio como con una instalación realizada con más de mil quinientos lápices en el stand del CitiBank, sponsor de la Feria. Durante los siguientes años expuso en diferentes galerías de la ciudad de Buenos Aires.
En 2017 nace Mora Lamp- la lámpara de las ideas- como objeto de diseño desarrollado desde una perspectiva artística la que recibió el premio Tendencia en la Feria Puro Diseño en reconocimiento a la creatividad y la innovación.
En 2018 viaja a Brasil, a la ciudad de Manaos y Fortaleza donde expone durante un mes, su primera muestra internacional.
En el espacio Morada Lamp exhibe sus obras y organiza exposiciones de colegas. Allí también investiga, experimenta, realiza y vende sus obras directamente al público. Su interés está en el diálogo con las personas que son convocadas por su obra y escuchar en tiempo real qué sienten o piensan acerca de lo que ven: eso es sumamente enriquecedor para el proceso creativo.
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La obra de Mora Verón se nutre de la mirada crítica y reflexiva de las Vanguardias. Propone mirarnos, analizar los hábitos y preguntarse sobre lo que se consume. La operación es claramente la de barajar y dar de nuevo. En sus piezas se puede reconocer numerosos elementos que adquieren nuevo sentido, al haber sido reutilizados y reorganizados en otras composiciones, texturas y volúmenes. Con esta información, se puede comprender que re-Auto-tratos es la deconstrucción de la palabra “autorretrato” y una llamada de atención sobre cómo se trata y qué tipo de trato se dispensa a lo que lo rodea (humano y no-humano). Es una invitación a repensar los hábitos, tarea que empieza por casa. La esencia de la muestra en sí misma es proponer la deconstrucción y reorganización de los paradigmas que ya conocemos. Empecemos por los desechos, pero sigamos por las ideas.
Esta muestra forma parte del Ciclo Reactivarte. La artista participará reciclando los residuos y creando con ellos obras de arte en Campo Quijano el sábado 14 y domingo 15, a partir de las 9.
La manera de hacer sus obras, es su manera de pensar: realiza la tarea positivamente, produce desde lo que ya existe y busca la manera de darle una nueva vida a lo que a simple vista podría pensarse como descarte. Desde 2012 dirige el Atelier Morada ubicado en el corazón de Palermo Soho. Es su espacio, allí trabaja y expone sus obras.
Reutilizar, reorganizar y resignificar los materiales son los ejes prácticos fundamentales que dan fuerza a sus obras. Verón tiene una predilección hacia los objetos de la vida cotidiana, la manera de canalizar su lenguaje plástico y forma de expresión es a través de esculturas e instalaciones donde puede explayarse en texturas, volúmenes y patrones, como si fueran marcando distintos ritmos, todo esto en clave figurativa y abstracta. El concepto de suprareciclaje (del inglés, upcycling) es central en su trabajo porque propone dotar de mayor valor a elementos de desecho y, de esta manera, contribuir con el medioambiente.
En 2013, Rogelio Polesello adquirió varias su obras y trabajaron en conjunto en la obra que terminaría siendo el regalo de Polesello a Marta Minujín, para los 70 años de casamiento con el arte.
En 2014 Verón participó en la Feria Arte Espacio en el Hipódromo de San Isidro, tanto con un stand propio como con una instalación realizada con más de mil quinientos lápices en el stand del CitiBank, sponsor de la Feria. Durante los siguientes años expuso en diferentes galerías de la ciudad de Buenos Aires.
En 2017 nace Mora Lamp- la lámpara de las ideas- como objeto de diseño desarrollado desde una perspectiva artística la que recibió el premio Tendencia en la Feria Puro Diseño en reconocimiento a la creatividad y la innovación.
En 2018 viaja a Brasil, a la ciudad de Manaos y Fortaleza donde expone durante un mes, su primera muestra internacional.
En el espacio Morada Lamp exhibe sus obras y organiza exposiciones de colegas. Allí también investiga, experimenta, realiza y vende sus obras directamente al público. Su interés está en el diálogo con las personas que son convocadas por su obra y escuchar en tiempo real qué sienten o piensan acerca de lo que ven: eso es sumamente enriquecedor para el proceso creativo.