Taxistas de diferentes gremios se agruparon y lanzaron un ultimátum a los gobiernos provincial y municipal. Al tiempo que advirtieron que si no hay alguna solución sobre la situación de la AMT, los controles a los remises ilegales y la desestimación oficial al desembarco de Uber, llevarán adelante medidas de fuerza.
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Taxistas de diferentes gremios se agruparon y lanzaron un ultimátum a los gobiernos provincial y municipal. Al tiempo que advirtieron que si no hay alguna solución sobre la situación de la AMT, los controles a los remises ilegales y la desestimación oficial al desembarco de Uber, llevarán adelante medidas de fuerza.
El sector no pasa su mejor momento y la crisis económica que vive el país hace que la rentabilidad sea cada vez menor. Un peón de taxi que trabaja, en promedio, 12 horas se lleva a su casa unos 400 pesos. Además, debe rogar que al auto no se le rompa nada durante el mes, porque cada día perdido en el taller es oro.
A la redacción de El Tribuno llegaron Juan Manuel Crespo, titular de la Cámara de Propietarios de Taxi; Enrique Ramírez, cooperativa de taxi Don Omar; Alfredo Carrizo, secretario general del Peones de Taxi, y Marcelo Girón, secretario general del Sindicato Único de Peones de Taxi de Salta. Ellos mostraron preocupación por distintos temas. Además, señalaron que si no tienen respuestas llevarán adelante medidas de fuerza, en principio, el martes 17, a partir de las 10, realizarán una manifestación por las calles del centro.
Uno de reclamos en el que se centraron es que desde el 10 de diciembre hasta ahora la Provincia y la Municipalidad de Salta no firmaron el convenio por medio del cual la AMT queda facultada para realizar una serie de diligencias referidas al transporte de pasajeros, entre ellos el impropio.
Los referentes afirmaron que hay muchas personas que no pueden hacer traspasos de licencias y demás trámites legales, porque al no estar el convenio, en la AMT nadie puede firmar los papeles. "Todo está paralizado. Hasta el cupo de licencia femenino que se había prometido quedó paralizado", advirtieron.
Otro reclamo puntual es la falta de controles a los remises ilegales. De acuerdo a lo que señalan, la mayoría de las remiseras son barriales. "Nosotros queremos que se hagan controles serios que permitan ordenar el transporte en Salta. Que no haya truchos, que los remises vuelvan a ser un servicio puerta a puerta y nosotros trabajar tranquilos en las calles", aseguraron los referentes sindicales.
En la ciudad de Salta hay alrededor de 1.530 taxis, unos 1.700 remises y los ilegales están estimados en 1.300.
Crisis y Uber
La crisis económica sacude fuerte a todos los sectores y los taxis no son ajenos. Los trabajadores afirmaron que hace unos 4 años un taxista que trabajaba unas 8 horas en promedio realizaba unos 24 viajes. Hoy apenas realiza 14.
El parque automotor de taxis, en promedio, es modelo 2012. Los gremialistas aseguran que un auto cuesta en la actualidad cerca de un millón de pesos, por lo que es muy difícil cambiarlo.
Por último hicieron foco en que la llegada de un sistema como el de Uber sería el fin de los taxis y remises en la ciudad, por lo que pidieron a las autoridades que no se le dé lugar al arribo de esta plataforma. "Uber generaría muchos desempleados", advirtieron.