Los primeros cien días de Bettina Romero en la Intendencia de Salta también estuvieron trazados por la complejidad económica y sanitaria.
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Los primeros cien días de Bettina Romero en la Intendencia de Salta también estuvieron trazados por la complejidad económica y sanitaria.
Primero fue el brote de salmonella, luego los operativos de prevención por el dengue y por último, el coronavirus. Por los casos de salmonelosis que se dieron en el verano la Intendencia formó un comité y se incrementaron los controles de la venta de comida ambulante.
En cuanto a las acciones para prevenir la proliferación de los mosquitos Aedes aegypti, se descacharraron unas 800 toneladas de residuos en los barrios. Con eso se apuntó a evitar casos de dengue, zika y chikungunya.
Ante la amenaza del coronavirus, primero se restringió la atención en las dependencias de la ciudad. Se tomaron medidas para la reducción de personas en restaurantes y se lanzó una campaña para que los habitantes de la ciudad se quedaran en sus casas.
El municipio también participó de la entrega de más de 24 mil tarjetas Alimentar, en el marco del plan Argentina contra el Hambre, del Gobierno nacional.
Uno de los primeros conflictos que tuvo la intendenta Bettina Romero fue el reclamo de los trabajadores ante la incertidumbre que había generado la eliminación del impuesto que financiaba la Cooperadora Asistencial.
A mediados de febrero hubo un acuerdo que fijó que los programas descentralizados, asistencia crítica y sepelios queden a cargo de la Intendencia, mientras que el Gobierno provincial absorbió la Copa de Leche.
La gestión arrancó con la premisa de contener el gasto público y hacer más eficientes los recursos. La intendenta Romero marcó el fuerte peso que tiene el gasto corriente en el presupuesto.
Los barrios
En sintonía con el discurso electoral, la intendenta focalizó algunas acciones para los barrios. Lo más reciente: se anunció la recuperación de espacios verdes con una inversión de 40 millones de pesos.
Desde la Intendencia remarcaron el plan de descentralización, con áreas de atención al vecino. Se abrió una ventanilla única para agilizar y dar prioridad de atención a los barriadas populares.
Entre las obras se detacan las que darán mayor conectividad a los barrios, como los puentes San José y Santa Lucía, que están en ejecución, y la pasarela de Villa Asunción.
En los barrios se limpiaron 12.000 metros lineales de canales y se desmalezaron 921.000 hectáreas.
En el hospital de mascotas hubo más de 15 mil atenciones.
Centro
La Municipalidad arrancó con el plan para sacar el cableado aéreo. Días atrás se retiraron unos 2 mil metros. Se anunció, además, un plan de obras de la plaza 9 de Julio.
Para agilizar las obras privadas se firmaron convenios con entidades del tercer sector para acelerar y garantizar la eficiencia en la habilitación.
Desde el municipio anunciaron la creación del primer observatorio de estadísticas sociourbanas de la ciudad.
Políticas de género.
En cuanto a políticas de género, arrancaron en los barrios con los Centros Integrales de la Mujer que están funcionando en los CIC y Nidos. Desde el gobierno de la ciudad señalaron que se asistieron a 450 mujeres víctimas de violencia familiar y de género. Por otra parte, se lanzó la capacitación del personal con la ley Micaela.
En el programa Modo Verano hubo actividades en los CIC, DIAT y Nidos, donde participan mas de 5000 niños y niñas. Se desarrollaron actividades en los complejos deportivos y natatorios municipales, llegando a más de 80.000 beneficiarios.