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Por cada día de cuarentena obligatoria la economía de Salta perderá $900 millones

Piden la emergencia económica. Los más golpeados son los cuentapropistas.
Domingo, 22 de marzo de 2020 02:11

Todos los sectores de la actividad económica viven momentos de preocupación e incertidumbre frente a una pandemia que aún no tiene respuestas definitivas sobre sus alcances a nivel global.

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Todos los sectores de la actividad económica viven momentos de preocupación e incertidumbre frente a una pandemia que aún no tiene respuestas definitivas sobre sus alcances a nivel global.

¿Cuánto costará cada día de cuarentena total obligatoria? ¿Cómo impactará el avance del coronavirus en diferentes sectores que venían golpeados por la crisis económica del país? Estos interrogantes desvelan por estas horas a la producción primaria, la industria, el comercio, la minería y el turismo. También a monotributistas y cuentapropistas que viven al día en medio de la cuarentena obligatoria que empezó el viernes y se extendería, en principio, hasta fin de mes.

Con todas las limitaciones que plantea el complejo escenario, economistas y empresarios de distintos rubros compartieron con El Tribuno algunas impresiones de interés.

Lucas Dapena, economista jefe de la Fundación Mediterránea para el NOA, estimó que cada día de cuarentena le costará a la economía de la provincia unos $900 millones. Hizo ese cálculo a partir de las pérdidas que informó el gobierno nacional por el paro general del 29 de mayo de 2019. Fueron entonces $40.500 millones que, actualizados con los índices inflacionarios, ascenderían hoy a cerca de $60.000 millones. Teniendo en cuenta que Salta participa con el 1,5% en el producto bruto interno argentino, la cuenta final cierra en $900 millones. Este monto tiene también un correlato lógico con el producto bruto geográfico provincial, que históricamente se ubicó en torno de los 4.500 millones de dólares anuales.

"Es fundamental que haya un apoyo al trabajador independiente, al cuentapropista, y al informal porque en Salta son muchos y llevan la peor parte", advirtió el investigador del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL).

"Hoy, desde un punto de vista económico, hay dos Salta: una que tiene trabajo seguro y en la que se cobra aún estando en casa por no poder ir a trabajar y se actualizan los salarios, y otra en la que muchos están peleando en la economía privada para no perder empleos y ver de generar algún ingreso mientras dure esta situación", graficó el decano de la Facultad de Economía de la Universidad Católica. "Salta es pobre y hay que ser solidarios con los fondos públicos de forma tal que lleguen a quienes más los necesitan", insistió el investigador doctorado en ciencias económicas, tras señalar que a los pueblos originarios, que siguen sin ver solucionadas acuciantes problemáticas, se suman otros sectores desprotegidos por la economía.

En el universo de la informalidad, cientos de plomeros, gasistas, albañiles, choferes, jardineros, vendedores ambulantes, puesteros, feriantes y personas empleadas en casas de familia quedaron sin ingresos para cubrir necesidades vitales. Miles de hogares están apremiados por impuestos, tasas y deudas con intereses, cargos y vencimientos que aguardan ser frenados a la par de la pandemia. Diferentes ramas de la actividad también esperan medidas de emergencia que atemperen el impacto económico de la crisis sanitaria, el corte de las cadenas de pago, el cierre de negocios y el derrumbe de empleos.

El comercio

El presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Salta, Daniel Betzel, advirtió que la actividad económica está al borde de un "crack económico" de alcances impredecibles.

El titular de la Cámara Hotelera y Gastronómica, Eduardo Kira, resalto que "el turismo quedó completamente paralizado" en la antesala de Semana Santa.

El sector rural

El vicepresidente de la Sociedad Rural Salteña, Carlos Segón, aclaró que el agro y la ganadería, dos pilares del abastecimiento alimentario, están afectados por la pandemia y por una severa sequía.

La industria

La presidenta de la Unión Industrial de Salta, Paula Bibini, remarcó que la gravedad de la crisis obliga al sector a solicitar al gobierno nacional "una ayuda que permita a algunas empresas que se consideran esenciales afrontar los salarios y de esa manera poder mantener su producción y el abastecimiento".

Cerámica Alberdi, firma que tiene en la capital salteña el principal centro productivo de cerámicos del país, pagó los jornales de la primera quincena de marzo y apagó sus hornos en espera de que la crisis sea superada lo antes posible.

En este contexto, Julio Moreno, economista que ocupa una de las bancas de la Cámara de Diputados de la Provincia, precisó que "el cimbronazo de la recesión ya se siente especialmente en las Pyme, trabajadores independientes y actividades relacionadas con el turismo". Moreno adelantó que "el estado de vulnerabilidad social, económica y fiscal de la provincia hará que la recuperación sea mucho más lenta".

El legislador acotó: "Me llama sobremanera la atención que, como representantes del pueblo no hayamos trabajado en por lo menos dos comisiones, las de Salud y Economía, para ayudar con la implementación de protocolos de prevención, en el seguimiento de la pandemia y el monitoreo de precios para evitar la especulación y garantizar el abastecimiento alimentario y de elementos esenciales".

En las puertas de un crack económico

El comercio, con su cadena de pagos cerca del quiebre, pide la emergencia económica. 

Un verdulero, ayer, en la avenida Jujuy. Jan Touzeau

“Las medidas que se dispusieron por la pandemia eran necesarias y son válidas, porque no hay dudas de que la salud es lo primero”, señaló el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Salta, Daniel Betzel, antes de aclarar que “la situación del sector es hoy más que crítica”. Explicó que “las empresas, con sus ventas totalmente desplomadas, deben cumplir con obligaciones básicas como los pagos a proveedores, sueldos y alquileres”.

El empresario advirtió que la actividad económica de Salta, con el mundo encaminado hacia una depresión global cuya profundidad aún resulta imprevisible, está cerca de “un crack”.

Con ese término, que remite a la gran depresión global del ‘ 29 y que vuelve resonar en informes de analistas por la expansión del coronavirus, Betzel afirmó que el comercio está “al borde de un quiebre de la cadena de pagos. Esto implicaría que muchas empresas no puedan pagar ni siquiera los sueldos de sus empleados y tengan que cerrar. Por eso pedimos que, a la par de la emergencia sanitaria, se declare la emergencia económica”, puntualizó.

A través de las cámaras nacionales, el comercio, que es el mayor empleador privado de Salta con cerca de 20.000 puestos registrados, solicitó que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) retrase el pago de obligaciones a proveedores con cheques a 30 días a partir de su vencimiento.

A nivel provincial, en tanto, sigue insistiendo por una exención del pago de ingresos brutos y tributos municipales mientras dure la cuarentena social que dispuso el gobierno ante el brote de COVID-19. 

Por el momento, el Gobierno provincial solo acordó una prórroga de vencimientos de los impuestos que recauda la Dirección general de Rentas (DGR) hasta el 1 de abril. 

En un documento que emitió el pasado miércoles, la Cámara de Comercio también pidió líneas de créditos blandos, reglas claras para la actividad comercial de productos de primera necesidad y logísticos y seguridad ante posibles saqueos.

Los sectores del turismo, paralizados

Solo unos pocos hoteles permanecen abiertos por razones humanitarias.

El presidente de la Cámara Hotelera y Gastronómica de Salta, Eduardo Kira, afirmó que los sectores relacionados con el turismo “son los que más castigados están en todo el país y el mundo” por la pandemia de coronavirus. 

Kira precisó que la provincia tiene más de 250 establecimientos hoteleros, de los que alrededor de 20 permanecen abiertos solo para contener, de modo solidario, a visitantes que fueron sorprendidos por la cuarentena obligatoria en Salta.

“No sabemos cuánto durará esta crisis ni por cuanto tiempo tendremos semejante impacto en la ocupación”, dijo el empresario, tras lamentar que la actividad turística quedara completamente paralizada en la antesala de un fin de semana largo y la temporada fuerte de Semana Santa.

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