Desde la Municipalidad de Salta se dio un paso más para acabar con la desidia de cientos de propietarios de baldíos que dejan sus terrenos en total abandono en la ciudad. Esa desaprensión hacia el prójimo tomó un carácter muy peligroso para la salud pública ante el avance del mosquito que transmite la enfermedad del dengue y que tiene en esos predios privados llenos de maleza y cacharros un lugar ideal para desarrollarse.
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Desde la Municipalidad de Salta se dio un paso más para acabar con la desidia de cientos de propietarios de baldíos que dejan sus terrenos en total abandono en la ciudad. Esa desaprensión hacia el prójimo tomó un carácter muy peligroso para la salud pública ante el avance del mosquito que transmite la enfermedad del dengue y que tiene en esos predios privados llenos de maleza y cacharros un lugar ideal para desarrollarse.
El secretario de Servicios Públicos y Ambiente del municipio capitalino, Aroldo Tonini, se reunió el martes pasado con el procurador general de la Provincia, Abel Cornejo, con el fin de convenir un protocolo para canalizar las denuncias en contra de los propietarios de inmuebles baldíos que incumplen con la obligación de mantenerlos limpios y desmalezados. Se dispuso que habrá una intervención del Ministerio Público en esos casos luego de que los dueños de los terrenos abandonados hayan sido intimados por la comuna.
Con el objetivo de evitar la proliferación del Aedes aegypti (vector del dengue, zika y chikungunya), Tonini y Cornejo firmaron un acta en la que quedó sentado que los fiscales penales competentes procederán a obtener las cautelares necesarias para permitir el ingreso y limpieza pertinente de los baldíos.
También investigarán las conductas omisivas para evaluar eventuales imputaciones a los infractores, por delitos contra la seguridad pública previstas en el Código Penal.
El procurador adelantó que el Ministerio Público Fiscal tratará las denuncias de los casos de quienes, en forma injustificada, se nieguen a cooperar con las tareas de prevención de sanidad pública y que por los medios pertinentes formulen los agentes municipales encargados en tal sentido.
130 mil pesos es la multa máxima que se quiere fijar para quienes dejen sus terrenos en estado de abandono.
Tonini, en tanto, dio a conocer que bajo la supervisión de la comuna capitalina hay más de 20.000 baldíos y gran parte de sus propietarios ofrecen impedimentos u obstáculos para ingresar y proceder a las tareas de limpieza.
Duras sanciones
El Gobierno municipal también abrió otro frente de lucha contra los que abandonan sus terrenos, con la presentación de un proyecto en el Concejo Deliberante para la modificación de la ordenanza 15.415, que es la que fija las sanciones contra los contribuyentes incumplidores.
Entre las principales modificaciones se solicita incrementar las cantidades de unidades tributarias por infringir diversas normas de higiene, entre ellas la falta de mantenimiento de terrenos baldíos y conformación de microbasurales.
De esa manera, las infracciones de acuerdo a la ordenanza establecerían sanciones de 200 a 9.000 unidades tributarias, dependiendo la gravedad. Traducido, la multa máxima sería de casi $130.000.
Entre otras faltas de consideración se encuentran arrojar aguas servidas a la vía pública, no tener las veredas limpias y abandonar vehículos particulares en la vía pública o baldíos.
Solo la semana pasada, los operarios de la Municipalidad retiraron 868 toneladas de residuos y cacharros, y se limpiaron 18 baldíos abiertos en mal estado.
Desde el inicio del operativo de limpieza se retiraron 2.908 toneladas de chatarra y residuos, se limpiaron 29 baldíos en mal estado y se notificaron 85 terrenos abandonados.