Una bandera argentina de 11 metros de largo por 8 de alto, emplazada en un lugar estratégico de Villa Los Tarcos en Cerrillos, fue durante toda la jornada del 25 de Mayo el lugar más convocante del Valle de Lerma, que pudo recordar el Día de la Patria a pesar de las inclemencias de la pandemia y sus privaciones.
Además, en el lugar de su emplazamiento una dama vestida a la usanza de la época de la Revolución de Mayo obsequiaba gratuitamente a transeúntes y automovilistas el tradicional chocolate patrio. Asimismo, numerosas familias se acercaban al pie de la bandera celeste y blanca con un sol dorado en el centro, para sacarse fotografías junto a enseña nacional.
La feliz iniciativa, concretada por el matrimonio Gimenez-Muñoz, hizo recordar a numerosos salteños cuando hace unos años los comercios, tanto de la ciudad capital como del interior de la provincia, solían adornar para estas conmemoraciones las vidrieras de sus negocios con distintos motivos patrios.
Incluso las municipalidades sabían organizar concursos de vidrieras referidos a estas fechas patrias.
Ojalá que la iniciativa que ayer se concretó en una esquina de Cerrillos pueda ser imitada el próximo 20 de junio, Día de la Bandera, bicentenario de la muerte del general Manuel Belgrano, y el 9 de Julio, Día de la Independencia, en distintos lugares de la provincia, máxime cuando a los argentinos nos toca vivir momentos muy difíciles por la pandemia.
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Una bandera argentina de 11 metros de largo por 8 de alto, emplazada en un lugar estratégico de Villa Los Tarcos en Cerrillos, fue durante toda la jornada del 25 de Mayo el lugar más convocante del Valle de Lerma, que pudo recordar el Día de la Patria a pesar de las inclemencias de la pandemia y sus privaciones.
Además, en el lugar de su emplazamiento una dama vestida a la usanza de la época de la Revolución de Mayo obsequiaba gratuitamente a transeúntes y automovilistas el tradicional chocolate patrio. Asimismo, numerosas familias se acercaban al pie de la bandera celeste y blanca con un sol dorado en el centro, para sacarse fotografías junto a enseña nacional.
La feliz iniciativa, concretada por el matrimonio Gimenez-Muñoz, hizo recordar a numerosos salteños cuando hace unos años los comercios, tanto de la ciudad capital como del interior de la provincia, solían adornar para estas conmemoraciones las vidrieras de sus negocios con distintos motivos patrios.
Incluso las municipalidades sabían organizar concursos de vidrieras referidos a estas fechas patrias.
Ojalá que la iniciativa que ayer se concretó en una esquina de Cerrillos pueda ser imitada el próximo 20 de junio, Día de la Bandera, bicentenario de la muerte del general Manuel Belgrano, y el 9 de Julio, Día de la Independencia, en distintos lugares de la provincia, máxime cuando a los argentinos nos toca vivir momentos muy difíciles por la pandemia.