Otro fin de semana sin poder correr. Esteban Cístola pasó otro domingo en familia y en cuarentena, como desde hace dos meses.
El piloto salteño debió disputar ayer la sexta fecha del Turismo Carretera Pista (compite a la par del Turismo Carretera) en Termas de Río Hondo. Pero el automovilismo, como la gran mayoría de los deportes, sigue suspendido y hasta nuevo aviso.
“Por el momento estoy bien, tratando de pasar la cuarentena. Por suerte no dependo solo del automovilismo. Mi familia trabaja con temas del campo y estoy metido ahí”, contó Cístola desde su residencia en la capital salteña.
El piloto del equipo Rus Med consideró que “el automovilismo es un deporte individual, lo que complica es la convivencia entre los mecánicos y el piloto en los boxes”. Para ser más precisos, unas mil personas comparten espacios sumando las categorías de TC y TC Pista cada fin de semana de competencia.
Mientras aguarda el regreso de las carreras, Cístola se dedica a los entrenamientos físicos: “Nuestro trabajo quizá no sea como la de un jugador de fútbol, pero se necesita estar entrenado para aguantar las temporaturas dentro del auto. Es un deporte de alto riesgo y se necesita la cabeza limpia, tener un buen estado físico para pensar y reaccionar bien”.
Ayer debía disputarse una nuva fecha en Termas de Río Hondo, pero esta y las tres jornadas anteriores fueron suspendidas. Las dos únicas pruebas que se disputaron son las del 16 de febrero en Viedma y del 8 de marzo en Neuquén.
La única competencia que se lleva a cabo es la del TC Virtual, y que ayer tuvo como ganador a Agustín Canapino en las “100 Millas de Rafaela” por la quinta fecha de este campeonato que se disputa desde la declaración de la pandemia.
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Otro fin de semana sin poder correr. Esteban Cístola pasó otro domingo en familia y en cuarentena, como desde hace dos meses.
El piloto salteño debió disputar ayer la sexta fecha del Turismo Carretera Pista (compite a la par del Turismo Carretera) en Termas de Río Hondo. Pero el automovilismo, como la gran mayoría de los deportes, sigue suspendido y hasta nuevo aviso.
“Por el momento estoy bien, tratando de pasar la cuarentena. Por suerte no dependo solo del automovilismo. Mi familia trabaja con temas del campo y estoy metido ahí”, contó Cístola desde su residencia en la capital salteña.
El piloto del equipo Rus Med consideró que “el automovilismo es un deporte individual, lo que complica es la convivencia entre los mecánicos y el piloto en los boxes”. Para ser más precisos, unas mil personas comparten espacios sumando las categorías de TC y TC Pista cada fin de semana de competencia.
Mientras aguarda el regreso de las carreras, Cístola se dedica a los entrenamientos físicos: “Nuestro trabajo quizá no sea como la de un jugador de fútbol, pero se necesita estar entrenado para aguantar las temporaturas dentro del auto. Es un deporte de alto riesgo y se necesita la cabeza limpia, tener un buen estado físico para pensar y reaccionar bien”.
Ayer debía disputarse una nuva fecha en Termas de Río Hondo, pero esta y las tres jornadas anteriores fueron suspendidas. Las dos únicas pruebas que se disputaron son las del 16 de febrero en Viedma y del 8 de marzo en Neuquén.
La única competencia que se lleva a cabo es la del TC Virtual, y que ayer tuvo como ganador a Agustín Canapino en las “100 Millas de Rafaela” por la quinta fecha de este campeonato que se disputa desde la declaración de la pandemia.