Con el colapso de la red de salud y más de 1000 personas esperando una cama de hospital, la ciudad de Río de Janeiro se enfrentó a un nuevo pico de muertes por coronavirus ayer. Tanto en el estado como en el municipio, a pesar de las fluctuaciones diarias, las señales de advertencia se dispararon porque alrededor del 90% de las camas de UCI para COVID-19 ya están ocupadas. Y hay una cola de pacientes que buscan un lugar para quedarse.
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Con el colapso de la red de salud y más de 1000 personas esperando una cama de hospital, la ciudad de Río de Janeiro se enfrentó a un nuevo pico de muertes por coronavirus ayer. Tanto en el estado como en el municipio, a pesar de las fluctuaciones diarias, las señales de advertencia se dispararon porque alrededor del 90% de las camas de UCI para COVID-19 ya están ocupadas. Y hay una cola de pacientes que buscan un lugar para quedarse.
El boletín publicado por el Departamento de Salud del estado, Río registró 189 muertes más ayer. El número más alto en 24 horas había sido 82 decesos el miércoles pasado. Los crecimientos llegan en un momento en que el alcalde Marcelo Crivella y el gobernador Wilson Witzel están estudiando la posibilidad de un bloqueo , en medio del avance de la pandemia en Brasil, convertido en el principal foco de casos y muertes en América Latina.
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Witzel dijo que la propuesta de cierre de Río ya se está preparando , e incluye bloqueos viales, la creación de una autorización para que las personas circulen en las calles, y la prohibición de autos privados en las rutas, con algunas excepciones. No se determinó aún la fecha límite para la implementación de las medidas, ni siquiera cómo se implementarán y por cuánto tiempo.
Solo en la ciudad de Río, 9.051 personas resultaron infectadas y 919 murieron. En total, el estado ya ha acumulado 1.394 muertes y 14.156 casos desde el comienzo de la pandemia. Todavía hay 570 muertes bajo investigación.
Crivella ya ha dicho que analiza las recomendaciones de cierre hechas por un informe de Fiocruz, pero que también recibe solicitudes de empresarios para aliviar las restricciones. El gobernador Witzel decidió transferir la decisión de implementar el cierre a los alcaldes. Prometió que los municipios contarán con el apoyo de la policía. Ante la escalada de la enfermedad, el próximo lunes Río lanzará el tercer hospital de campaña , en Barra da Tijuca. Empezará con 100 camas y pasará en dos semanas a su plena capacidad: 200 vacantes, 50 de UCI.