La situación sigue tensa y sin visos de mejoría por ahora. Es que al despido de los casi 370 trabajadores que quedaban de la obra de reacondicionamiento del ferrocarril Belgrano entre Pichanal y Talavera, se sumó en la tarde del miércoles la ocupación pacífica del obrador que la empresa a cargo de la obra, Maquinvest, tiene en Joaquín V. González.
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La situación sigue tensa y sin visos de mejoría por ahora. Es que al despido de los casi 370 trabajadores que quedaban de la obra de reacondicionamiento del ferrocarril Belgrano entre Pichanal y Talavera, se sumó en la tarde del miércoles la ocupación pacífica del obrador que la empresa a cargo de la obra, Maquinvest, tiene en Joaquín V. González.
Es que hace unos días la empresa despidió a un grupo nutrido de trabajadores y esta semana hizo lo propio con los 3.567 que quedaban trabajando.
La UTE a cargo de la obra invoca razones financieras y falta de pago de certificados de obra, por parte del Gobierno nacional, desde finales del año pasado hasta el presente.
Esas fueron las razones esgrimidas por Maquinvest en cada una de las audiencias de conciliación que se llevaron a cabo en las oficinas del Ministerio de Trabajo de la nación, entre representantes de la firma y dirigentes de la Uocra, gremio que agrupa a los trabajadores afectados.
Una obra de 300 kilómetros
La UTE tiene a su cargo la obra de reacondicionamiento de 300 kilómetros de vías entre Pichanal y Nuestras Señora de Talavera, ramal fundamental para sacar la producción del norte provincial hacia el puerto de Barranqueras, en la provincia del Chaco.
En la sexta audiencia llevada a cabo el miércoles, la empresa detalló que no cobró el 70% de los certificados de obra correspondientes a noviembre de 2019 ni ninguno de los meses subsiguientes, lo que hace un saldo de casi $1.700 millones. "En consecuencia, y ante la imposibilidad de encontrar una solución, la UTE lamenta comunicar que al no poder afrontar los gastos que insume la continuidad de la obra, se vio forzada a paralizarla virtualmente y en la obligación de discontinuar el contrato de 367 empleados", comunicaron desde las empresa.
El sindicato, disconforme
Lo tajante del comunicado encendió las alarmas y los ánimos del poderoso sindicato de la construcción, que alegó por su parte, incumplimiento y falta de acatamiento por parte de la empresa a los decretos del Poder Ejecutivo Nacional que impiden el despido de empleados mientras dure la emergencia desatada por la pandemia.
Desde Maquinvest, a su turno, alegaron que ayer liquidaron los sueldos de mayo de todo el personal afectado, dado que faltaba un 70%. Y que el personal despedido tendría prioridad para ser contratado una vez que se solucione la emergencia. También advirtió que los obreros despedidos podrían cobrar el seguro de desempleo, dado que todos los pagos preventivos fueron realizados por la empresa.
Desde la Uocra afirmaron que no son 367 los trabajadores afectados sino 700. El gremio "repudia y denuncia esa irresponsabilidad patronal y la pasividad de la Administración de Infraestructuras Ferroviarias Sociedad del Estado (Adifse), dependiente de la cartera de Transporte".
China no colabora
Otra de las razones invocados por la UTE para respaldar su decisión de no seguir con los trabajos fue la falta de desembolsos del préstamo de China que aseguraba la financiación de la obra.
Es que el gigante asiático había comprometido el 70% del dinero necesario para la obra.
Mientras tanto, un nutrido grupo de hombres pasó ya dos noches prácticamente a la intemperie, cuando el frío del invierno comenzó a apretar en una zona donde normalmente no se siente. Pero dijeron tener voluntad para continuar con su protesta hasta que los restitu yan en sus labores.