En los últimos meses la actividad delictiva se ha incrementado y los motovehículos se han transformado en uno de los objetos más robados. La poca atención que los propietarios ponen en sus motos al momento de estacionarlas, es una de las causas que contribuye y facilita el robo.
A esto último se le debe sumar el hecho de que el número de motos que forman parte del parque automotor de General Güemes, se ha incrementado enormemente debido a la facilidad crediticia para su compra. Esto, a su vez, eleva el porcentaje de probabilidad de los robos, por la disponibilidad del productos en la vía pública.
“Hemos tenido varios robos de motos, la mayoría de los cuales pudimos esclarecer y restituir el motovehículo a su propietario, pero sabemos que hay muchos otros robos que no tenemos registrado porque los damnificados no realizan la correspondiente denuncia. Tal vez porque no tienen los papeles o porque piensan que no vamos a recuperarla”, explicó el comisario Mendoza como jefe de la Brigada de Investigaciones.
“Es muy importante que realicen las denuncias porque nos ayuda a resolver los casos, aportan datos que son muy valiosos para nuestra investigación. Quizás no la recuperamos en lo inmediato, pero siempre es posible que lleguemos al rodado investigando otras denuncias”, agregó el funcionario.
La última moto recuperada fue encontrada escondida entre los yuyarales cercanos a las vías del ferrocarril, el hallazgo fue realizado por dos vecinos del lugar. “Aquí se ve mucho movimiento en horas de la noche, es una juntadera donde traen cosas robadas, nosotros de casualidad pudimos observar esta moto escondida entre los yuyos e informamos a la Policía”, explicaron los hombres que encontraron la moto.
“Ellos -por los ladrones- hacen eso porque no la pueden trasladar pechando por mucho tiempo ya que los están buscando, entonces esperan que todo se clame para venir a buscarla”, manifestó el vecino.
Una forma de operar que tienen los delincuentes cuando roban una moto, es la de buscar un baldío, un descampado o los cañaverales para esconderlas y regresar al día siguiente a buscarlas. “Se tiene conocimiento de cuáles son los lugares donde abandonan momentáneamente lo que robaron, son justamente los escenarios donde vamos primero, por supuesto que con el tiempo van cambiando, pero en muchas ocasiones encontramos motos desarmadas y solo recuperamos partes de ella”, expresó el comisario Mendoza.
Se trata de una modalidad que se incrementó en el último tiempo, sumado a esto los usuarios y propietarios de motocicletas en General Güemes se encuentran en un contexto de incertidumbre importante, una situación tensa dado que puede pasar que se crucen con el o los delincuentes en el momento del hecho.
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En los últimos meses la actividad delictiva se ha incrementado y los motovehículos se han transformado en uno de los objetos más robados. La poca atención que los propietarios ponen en sus motos al momento de estacionarlas, es una de las causas que contribuye y facilita el robo.
A esto último se le debe sumar el hecho de que el número de motos que forman parte del parque automotor de General Güemes, se ha incrementado enormemente debido a la facilidad crediticia para su compra. Esto, a su vez, eleva el porcentaje de probabilidad de los robos, por la disponibilidad del productos en la vía pública.
“Hemos tenido varios robos de motos, la mayoría de los cuales pudimos esclarecer y restituir el motovehículo a su propietario, pero sabemos que hay muchos otros robos que no tenemos registrado porque los damnificados no realizan la correspondiente denuncia. Tal vez porque no tienen los papeles o porque piensan que no vamos a recuperarla”, explicó el comisario Mendoza como jefe de la Brigada de Investigaciones.
“Es muy importante que realicen las denuncias porque nos ayuda a resolver los casos, aportan datos que son muy valiosos para nuestra investigación. Quizás no la recuperamos en lo inmediato, pero siempre es posible que lleguemos al rodado investigando otras denuncias”, agregó el funcionario.
La última moto recuperada fue encontrada escondida entre los yuyarales cercanos a las vías del ferrocarril, el hallazgo fue realizado por dos vecinos del lugar. “Aquí se ve mucho movimiento en horas de la noche, es una juntadera donde traen cosas robadas, nosotros de casualidad pudimos observar esta moto escondida entre los yuyos e informamos a la Policía”, explicaron los hombres que encontraron la moto.
“Ellos -por los ladrones- hacen eso porque no la pueden trasladar pechando por mucho tiempo ya que los están buscando, entonces esperan que todo se clame para venir a buscarla”, manifestó el vecino.
Una forma de operar que tienen los delincuentes cuando roban una moto, es la de buscar un baldío, un descampado o los cañaverales para esconderlas y regresar al día siguiente a buscarlas. “Se tiene conocimiento de cuáles son los lugares donde abandonan momentáneamente lo que robaron, son justamente los escenarios donde vamos primero, por supuesto que con el tiempo van cambiando, pero en muchas ocasiones encontramos motos desarmadas y solo recuperamos partes de ella”, expresó el comisario Mendoza.
Se trata de una modalidad que se incrementó en el último tiempo, sumado a esto los usuarios y propietarios de motocicletas en General Güemes se encuentran en un contexto de incertidumbre importante, una situación tensa dado que puede pasar que se crucen con el o los delincuentes en el momento del hecho.
Prevenir y ser cuidadosos
Para prevenir el robo de vehículos en Güemes el comisario Mendoza volvió a recomendar a los ocupantes de motos y bicicletas que sean más cuidadosos a la hora de estacionar o guardar el motovehículo. “Vemos que las motos son dejadas en las veredas, muchas veces permanecen allí toda la noche, ninguna moto tiene puesto un elemento de seguridad como un candado por ejemplo, la gente de esta ciudad aún es muy confiada y, lamentablemente, eso facilita el accionar delictivo de los malvivientes”, finalizó Mendoza.