Intensos vientos soplaron ayer por la tarde en la zona sur y oeste de la ciudad de Salta y en buena parte del Valle de Lerma. En Cerrillos, se registraron ráfagas de viento de hasta 70 kilómetros por hora, lo que provocó la voladuras de chapas y la caída de árboles y postes.
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Intensos vientos soplaron ayer por la tarde en la zona sur y oeste de la ciudad de Salta y en buena parte del Valle de Lerma. En Cerrillos, se registraron ráfagas de viento de hasta 70 kilómetros por hora, lo que provocó la voladuras de chapas y la caída de árboles y postes.
Vialidad recomendó circular con precaución a los vehículos, debido a que había disminuido mucho la visibilidad por la tierra en suspensión sobre las rutas nacionales 68 y 51.
Cabe recordar que el Servicio Meteorológico Nacional había lanzado un alerta por fuertes vientos para la zona cordillerana y oeste de Catamarca, zona cordillerana, centro y oeste de Jujuy, zona cordillerana de La Rioja, zona cordillerana y oeste de Salta.
También se advirtió que hoy habrá un drástico descenso de la temperatura y que las mismas condiciones climáticas persistirán hasta el jueves.
Complicados en El Encón
La zona de El Encón estuvo cercada por las llamas dispersas por el viento norte que se hizo sentir en gran parte de Campo Quijano, Rosario de Lerma, Cerrillos y La Merced.
En la Quebrada del Toro hubo voladuras de techos de las viviendas de los pobladores. La capilla de El Mollar, frente a la escuelita, sufrió serios daños en su estructura.
Las chapas del techado fueron arrancadas de cuajo por el fuerte tiempo. El fenómeno natural se esperaba por esta zona. Pero no todos los vecinos estaban al tanto de la alerta de vientos cálidos e incipientes.
Las ráfagas superaron los 70 kilómetros la hora, suficiente para llevarse puestos techos, cableados, y propiciar grandes lenguas de fuego en diferentes zonas de esta parte del Valle de Lerma. No se reportaron lesionados. Solo los daños materiales que aún no pudieron ser relevados en su totalidad.
La ruta 23 poco antes de llegar a Rosario de Lerma. Javier Corbalán
Cercados por el fuego
Hacia la ruta nacional 51, en El Encón, una vivienda fue cercada por el fuego. Los daños fueron importantes en la propiedad que no se incendió en su totalidad. Los vecinos reclamaron cómo la falta de previsión de algunos dueños de terrenos dejó al descuido grandes dimensiones de espacios sometidas al fuego con los peligros que generó la situación de quienes residen de forma permanente en esa zona.
Cuatro dotaciones de bomberos y Defensa Civil trabajaron en toda esta área contigua a la ruta nacional 51 y en el límite con la jurisdicción de Salta capital. Hacia Cerrillos y Rosario de Lerma los barrios afectados incluían Ecosol, San Jorge e Islas Malvinas.
Los postes de luz en la zona del paraje Las Blancas quedaron "a punto de caerse" luego del fuerte viento.
En la capital
Vecinos de diferentes barrios del centro y del sur alertaron a este medio sobre las consecuencias provocadas por las ráfagas de vientos, consistentes siempre en caídas de árboles, voladuras de chapas y algún poste caído.
Enfermera y policía, heridos por una casilla de metal
El viento destruyó la estructura utilizada para el control del COVID-19.
Los restos de la casilla sobre la ruta 9/34.
Una enfermera y un efectivo de la Policía resultaron lesionados al ser destruido por el viento un puesto de control ubicado en la banquina de la ruta. La estructura de metal estaba ubicada sobre la ruta nacional 9/34, el acceso a la ciudad de Metán y estaba destinada a los controles por el COVID-19.
Tanto la enfermera como el policía se encontraban trabajando en el puesto de control ubicado en el acceso norte de Metán y resultaron heridos ayer a la tarde cuando la casilla ubicada en el lugar fue destruida por completo por las fuertes ráfagas de viento.
Se trata de las estructuras de metal que son ensambladas. Una fue colocada cerca del puente del río Conchas, sobre la ruta nacional 9/34.
El policía y la enfermera resultaron con lesiones que no fueron de gravedad. Fueron trasladados al hospital Del Carmen, donde fueron asistidos.
Las heridas
El efectivo presentaba traumatismo en la región lumbar y la enfermera en el fémur izquierdo y una rodilla.
En el lugar también se encontraba trabajando una mujer policía que resultó ilesa.
Si bien estamos en medio de una pandemia, la colocación de esa casilla de metal sobre la ruta nacional 9/34, viola todas las reglas y normas de seguridad. No se pueden colocar obstáculos de ese tipo sobre una transitada arteria, lo que representa un peligro.
Por otro lado, al parecer estaba mal armada porque el viento prácticamente la hizo “volar” del lugar.
El sacrificio del personal de seguridad y salud es destacable y debe ser reconocido. Deben resguardarse del frío en las noches. Pero deben respetarse las normas de seguridad para que estos hechos no se repitan.
Diez familias afectadas en La Caldera
El viento provocó voladuras de techos en varios barrios
Las fuertes ráfagas de la siesta provocaron la voladura de chapas y caída de postes en distintos puntos del Valle de Lerma. En el extremo norte, más precisamente en La Caldera, diez familias de los barrios Santiago Apóstol, El Jardín y el Balcón de Getsemaní fueron asistidas con movilidad de la Municipalidad local y de vecinos para trasladar sus pertenencias.
La Subsecretaría de Desarrollo Social gestionó la ayuda en Asistencia Crítica del Gobierno provincial para los damnificados.
No hubo que lamentar víctimas y solo se registraron daños materiales. Agentes municipales trabajaron en tareas de asistencia y relevamiento de daños.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió un alerta por vientos intensos para la zona cordillerana y oeste de Salta.
Un pedido
El intendente Diego Sumbay pidió a la comunidad que ante fenómenos de esta naturaleza se mantengan en el resguardo de sus hogares.
“Con Desarrollo Social estamos relevando los daños. Ya estuvimos en la zona sur y vamos a la zona del Balcón de Getsemaní”, afirmó.
Los trabajadores municipales con los vehículos asisten a las familias a cuyas casas se les volaron las chapas.
Operarios de Electricidad de Obras Públicas realizan trabajos preventivos, mientras que Edesa repone los postes que se cayeron.